En Paredes (Siero), en el entorno de la zona donde se ubica actualmente Parque Principado, se halló un “tesoro” a finales del siglo pasado, cuando se iniciaron los trabajos para la construcción del gran complejo comercial. Apareció entonces en esta zona una necrópolis tardorromana formada por 36 tumbas datadas entre los siglos IV y V después de Cristo. En los enterramientos se encontraron ricos ajuares, delicadas y trabajadas piezas de vidrio, jarras y vasos, además de distintos elementos de vajilla y algunos adornos de uso personal como un collar.

Parte de las piezas están expuestas en el Museo Arqueológico de Asturias, en Oviedo, aquellas que destacan por su relevancia y buen estado de conservación.

La zona en la que apareció la necrópolis de Paredes está señalizada en una de las áreas de aparcamiento de Parque Principado, frente al gran supermercado anexo a la entrada principal al complejo comercial. Para la mayoría de visitantes el lugar pasa desapercibido pese a la importancia de los hallazgos.

Los trabajos arqueológicos en la zona se desarrollaron entre 1997 y 1998.