Doce años de prisión –dos más que la fiscalía– por un delito de lesiones, con agravante de alevosía o abuso de superioridad, y una indemnización de 160.000 euros por las lesiones sufridas. Eso es lo que pide la acusación particular, ejercida por los letrados José Luis Rodríguez Tejón y Gonzalo Botas, para el joven de 27 años que agredió a un hombre de 58 años que perdió un ojo como consecuencia, tras una discusión por cuestiones de tráfico. Los hechos descritos sucedieron el 11 de enero de este año, en la calle Antonio Machado de Lugones, a las 16.38 horas.
En el escrito de la acusación, primero se describen los hechos tal y como sostiene que sucedieron. Tras un giro brusco realizado por el acusado, en el que invadió el carril contrario, el hombre de 58 años, que circulaba correctamente, hizo un gesto recriminando lo sucedido. Entonces, el joven dio marcha atrás a su vehículo, increpándole para salir. Lo siguiente fue que se colocó en “guardia de boxeo” -(deporte que practicaba) y le propinó tres golpes. El primero fue directo al ojo, lo que luego motivó que lo perdiera. Los dos siguientes le hicieron caer al suelo.
La hija del hombre de 58 años, que estaba presente, se bajó a ayudar a su padre, mientras que el agresor se subió a su vehículo y abandonó el lugar de los hechos. En base a todo ello, y considerando como agravante que el joven de 27 años sabía boxeo y entrenaba ese deporte, así como los daños causados a posteriori, que derivaron en una intervención quirúrgica y la pérdida de un ojo, dejando con un 40 por ciento de discapacidad al hombre, la acusación particular solicita para el joven doce años de cárcel. La fiscalía, por su parte, solicita una pena menor: diez años de prisión por delito de lesiones (sin agravante) y una indemnización de 80.000 euros en total por las lesiones infringidas.
