El olor a callos ya casi se cuela por las callejuelas de Noreña, el concejo vecino de Siero. Comienzan, a partir del próximo viernes 3 de diciembre hasta el miércoles 8 las Jornadas que reciben el nombre de este manjar, del que la Villa Condal puede estar orgullosa de presumir. Ayer, en su presentación, lo hicieron. "Noreña es garantía de comer bien gracias al esfuerzo de la industria chacinera y la restauración", reconoció la Alcaldesa, Amparo Antuña. Un ejemplo de ello son Herminia y Pilar Vilar, dueñas del restaurante Litual, y a las que se les dio un galardón como homenaje.

Su presencia fue, según el presidente de Otea, José Luis Álvarez Almeida, "iluminadora": le hizo cambiar su discurso, y agradecer a todas las personas que son como ellas y que le hizo, a las generaciones venideras estar ahí. "Os veo a vosotras y estoy viendo a mi madre, y a todas esas madres que lo dejaron todo. Veo a gente que se marchó a Suiza y luego regresó, sin nada, y arrancó con trabajo. Por gente como ellas las jornadas de los callos llevan 53 años". A su vez, aprovechó la ocasión - que le coincidía con un acto en el auditorio de Oviedo, pero rechazó ir por acudir a Noreña- para recordar la situación que atraviesa la hostelería en Asturias: "Sed responsables y ventilad. Sed parte de la solución, estas jornadas tienen que ser ejemplares, las mejores de la historia". Y explicó que, aunque el verano hubiera sido bueno, la gran parte de establecimientos cerrarán el año el números rojos y con el peor balance de su historia.

Herminia y Pilar, sin embargo, reusaron a tomar la palabra. El pregonero, el chef Sergio Rama, lo hizo por ellas: "Sois las culpables de continuar una tradición que hace grande la gastronomía asturiana". Y por eso, para él, era una ilusión tremenda "inmortalizar las jornadas", con una llama viva que no debería parar nunca. La alcaldesa después se dirigió hacia él, agradecida y emocionada: en su momento, había sido el encargado de gestionar el menú de su boda con Manolo, su marido fallecido hace alrededor de un año por coronavirus.

Y, entre aplausos y mucho cariño, concluyó la presentación de la Jornada de los Callos. Pero se podrá disfrutar de ella en más de una veintena de establecimientos hosteleros de Noreña. Además, habrá pasacalles todas las mañanas del fin de semana, una "scape room" el sábado y domingo en el Ayuntamiento, y sobre todo, buena gastronomía, de la que la Villa Condal está orgullosa.