El palacio de Aramil, también denominado de los Vigil de Quiñones, podría cambiar de manos en los próximos meses. Un importante empresario de la ganadería, originario de Grado pero con sus negocios en Madrid, está valorando dar un paso adelante y adquirir el inmueble protegido sierense. Así lo confirman fuentes conocedoras de la operación que ya han estado involucradas en otras transacciones como la del palacio de Celles.
Más que en el palacio en sí, el empresario estaría interesado en los terrenos que forman parte de la finca y que permitirían una explotación urbanística. Es más, sería el edificio, protegido por Patrimonio y en muy mal estado de conservación, lo que podría dar al traste con la operación de compra.
“Estamos pendientes de que la Consejería de Cultura nos indique lo que habría que hacer con el palacio”, indican los intermediarios del proceso, que estiman que el coste del complejo puede rondar los 300.000 o 350.000 euros”. Un precio sorprendentemente bajo, que encuentra su razón de ser en la enorme inversión que podría exigirse para rehabilitar el palacio. “Tendríamos que ver si se puede arreglar y revender, o dejarlo como está sin hacerle nada”, apuntan las citadas fuentes.
El palacio está situado en las proximidades de la iglesia de San Esteban de Aramil y data de finales del siglo XVII. Destaca la torre noreste que alberga el escudo de armas de la familia, la más poderosa de la mitad oriental del concejo de Siero durante varios siglos.
Dentro, el inmueble cuenta con un patio central a modo de corredor de madera sujetado por ocho columnas con balaustres. La fachada norte presenta huecos adintelados y un escudo, mientras que en la sur, en la parte baja, un doble arco céntrico da lugar al zaguán. Una línea de sillar resaltado marca la línea del piso superior.
Actualmente, el palacio se encuentra en estado de abandono y con deterioros que se presuponen importantes. Vecinos y partidos de la oposición han venido mostrando su preocupación y reclamando soluciones urgentes.
