El mercado nacional de ganado de Siero espera tener este 2022 un año récord en cuanto a concurrencia de reses, tras superar baches como la pandemia o la reciente huelga de camioneros que dejó el recinto sin actividad un par de semanas. Pese a todo, las cifras que se están registrando son las mejores desde 2016 y aún se espera que sigan creciendo a medida que avance el año. Todo hace prever que «los números serán los mejores en mucho tiempo», explica la concejala de Mercados, Ana Rosa Nosti.

El cómputo hasta ahora no deja mucho margen a la duda: la concurrencia de ganado en el recinto sierense ascendió entre enero y mayo a 43.015 reses, veintiséis más que en el mismo periodo del año pasado, cuando se alcanzaron los niveles máximos desde 2016. En los cinco primeros meses del 2021 se sumaron 42.989 animales en el recinto.

Hay que tener en cuenta que el año pasado fue también muy bueno, con hitos históricos como el registrado el último mes de septiembre, con una jornada, la del día 6, que entonces pulverizó todos los registros con la presencia de 1.819 reses en una sola sesión, el mayor número desde que abrió sus puertas el recinto, hace 30 años. Una alta afluencia que no sería raro repetir este año tras el verano, cuando se comercialicen las crías de las reses que paren en libertad, y que generan un aluvión de vendedores en esas fechas.

Pero sin adelantar acontecimientos, el cómputo ya es de récord en lo que va de 2022. Según los datos publicados por la Sociedad Asturiana de Estudios Económicos e Industriales (Sadei), la concurrencia de vacuno mayor y mediano se consolida como la gran locomotora del mercado sierense y aumentó un 12 por ciento, hasta las 22.105 reses, mientras que la de vacuno menor descendió un 9 por ciento, hasta 20.670. La de equino cayó en un 55 por ciento, hasta 240 ejemplares, puesto que la mayor parte de vendedores de potro para carne operan con canales directos y no llevan sus animales al mercado.

Durante el pasado año, la concurrencia de ganado en el mercado nacional sierense aumentó un 31,5 por ciento, hasta 110.835 reses, después de que en 2020 la actividad cayera a mínimos históricos por la crisis del covid. La fuerte recuperación del mercado durante el pasado año llevó la actividad a máximos de hace un lustro y se espera que la tendencia se mantenga al alza para los próximos meses. «Todo hace prever que será así, las cifras y las sensaciones son muy buenas», insiste Ana Rosa Nosti, con la perspectiva además de poder contar en breve de nuevo con el servicio de cafetería, tras unos trabajos de remodelación, y con la idea de acometer una renovación integral de las instalaciones en años venideros.

No en vano, el mercado poleso sigue siendo la referencia muchos compradores de diversas comunidades autónomas que vienen a por ganado, que luego ceban en otras explotaciones.

Los datos


Números al alza. Las cifras en lo que va de año marcan una tendencia al alza que podría hacer que 2022 cierre con datos de récord en cuanto a afluencia de reses al mercado nacional de ganado de Siero. Hasta mayo se dieron cita en el recinto un total de 43.015 animales, 26 más que en las mismas fechas del año pasado, y ya entonces se batieron las marcas de los últimos cinco años. 

El vacuno mayor, el más numeroso. Las reses de vacuno mayor y mediano se consolidan como el motor económico del recinto, con 22.105 ejemplares, mientras que el vacuno menor descendió un 9 por ciento. La mayor caída se ha dado en los equinos, toda vez que los productores de carne de potro operan con otros canales directos y no comercializan en el mercado.

Concurrencia con tendencia positiva. El año pasado la concurrencia de ganado en la Pola aumentó un 31,5 por ciento, hasta alcanzar las 110.835 reses, y este año el Ayuntamiento confía en volver a pulverizar los buenos números del año pasado, con «muy buenas sensaciones» en este sentido», como afirma la concejala de Mercados, Ana Rosa Nosti.