Los enfrentamientos entre hosteleros y clientes son cada vez más frecuentes en la red. El anonimato de las redes sociales hace que algunos comensales rebotados carguen tintas desde sus casas contra algunos establecimientos. La mayoría de las veces lo hacen con total impunidad. En este caso no ha sido así. Lo que era una mala crítica ha acabado, como un boomerang, convirtiéndose en un sonoro zasca al cliente por parte del empresario: "Un poco de empatía igual no le venía mal".

Todo comenzó con una mala crítica en una conocida red social de valoración de establecimientos. "La comida, excelente; pero el servicio, pésimo. No por sus trabajadores, sino por la falta de personal. No puede ser que tres camareros y un encargado atiendan 24 mesas. Es imposible realizar un buen servicio", critica el comensal.

La mala opinión vertida en internet no acabó aquí: "Sé que este comentario no servirá para su dueño, pero su propietario deja mucho que desear. Explotación de trabajo a sus empleados, que son los únicos que se preocupan del buen funcionamiento".

La dura crítica no gustó para nada al propietario del establecimiento, que no dudó en responder. "¿Ha oído usted hablar de ómicron? El encargado del que usted habla puede ser que sea el propietario y probablemente se encuentre igual de 'explotado' que el resto de trabajadores. Un poco de empatía igual no le venía mal", ha contestado.

Además de indignación, el mensaje destila también hartazgo por parte del empresario. No es para menos. El sector hostelero ha sido, sin lugar a dudas, el principal damnificado de la crisis sanitaria. Las restricciones impuestas por el Gobierno para tratar de frenar los contagios fueron especialmente severas con ellos y son incontables las empresas que tuvieron que bajar la persiana. Seguramente por eso, la respuesta del empresario fue tan contundente.

Este tipo de confrontaciones entre supuestos clientes insatisfechos y empresarios son cada vez más habituales en la red. Especialmente en las plataformas especializadas en el sector hostelero. Por este motivo, no son pocos los hosteleros que piden a este tipo de redes sociales que, al menos, exijan a los usuarios una prueba de compra antes de escribir su comentario, como podría ser un ticket.

Esto es debido a que muchos consideran que algunos de los comentarios que se vierten son falsos. Bien por parte de clientes enfadados que tratan de hacer el mayor daño posible al establecimiento, o por la competencia.

El posicionamiento en este tipo de redes sociales es importante, según la opinión de los empresarios del sector. Y es que aseguran que cada vez son más las personas que se guían por las críticas y los rankings de internet a la hora de elegir restaurante.