Los alumnos del colegio Hermanos Arregui de la Pola ya pueden disponer de un nuevo patio y zona de filas seguras para los usuarios del transporte, una vez solventado el conflicto con el Celestino Montoto por el uso de un espacio de aparcamiento. El Ayuntamiento de Siero intervino a finales de la semana pasada para ordenar la señalización del espacio, prohibiendo su utilización como estacionamiento y garantizando que los escolares puedan disponer de este patio de forma segura y sin la presencia de vehículos de profesores del Celestino Montoto, como venía ocurriendo desde principios de curso. Paralelamente, el Consistorio acondicionará con zahorra la zona en la que estacionan los docentes de este colegio para que, en caso de lluvia, no haya problemas con la presencia de charcos y de barro.

Se pone de este modo fin a una polémica que se remonta a antes de la pandemia, cuando los profesores del Celestino Montoto utilizaban un pequeño parking en la zona sur del complejo educativo que coincide con una puerta de acceso al Hermanos Arregui. El área se usó por los docentes del Celestino Montoto para dejar sus vehículos hasta la llegada del covid. Entonces, para mantener las distancias exigidas por la normativa antivirus, los directores de ambos centros acordaron que se dejaría de utilizar el parking y que en él se acondicionaría una nueva zona de patio para los pequeños del Hermanos Arregui.

Una solución ideal para este último centro, puesto que los niños de Primero y Segundo de Primaria estaban obligados hasta entonces a usar como patio un pasillo estrecho en la parte delantera, entre los dos colegios y sin posibilidad de que los alumnos corrieran ni pudieran jugar libremente.

El problema surgió con el inicio de este curso, la vuelta a la normalidad y la eliminación de los "grupos burbuja" y la separación en los patios, dado que los profesores del Celestino Montoto volvieron a usar el espacio que se había acondicionado como zona de juegos para dejar sus vehículos, al no haber orden en contra y haberlo hecho así a lo largo de los años.

Finalmente, tras varias reuniones y la intervención del Ayuntamiento, los dos colegios han enterrado el hacha de guerra. Los pequeños se quedarán con el patio y los maestros podrán aparcar en otra zona. De hecho, ya se había acondicionado un espacio en la parte trasera de los centros durante la pandemia del coronavirus y no habría mayor problema de espacio. En el Hermanos Arregui tienden la mano al Celestino Montoto para que, en caso de necesidad y dada la proximidad de las instalaciones, los niños de ambos colegios puedan compartir el espacio de patio durante los recreos, puesto que se trata de una zona al sol y con metros suficientes para muchos niños.