Una vida de película en Valdesoto: así se entretenían en el palacio de Siero en el siglo XIX

La imagen de familiares y servicio de los marqueses de Canillejas, que se exhibe en el Museo del Pueblo de Asturias, se tomó en 1895 en los jardines de la propiedad de la localidad sierense

La imagen de un momento de ocio y reunión en los jardines de Valdesoto, de 1895.

La imagen de un momento de ocio y reunión en los jardines de Valdesoto, de 1895. / Colección del Museo del Pueblo de Asturias

P. T.

El palacio de Valdesoto, en Siero, es una de las más bellas construcciones de este tipo del concejo, en la que además destaca su impresionante y cuidado jardín histórico. Su pasado no fue menos esplendoroso del que tiene hoy tras haber sido rehabilitado para acoger eventos: las imágenes de hace más de un siglo del lugar muestran las vestimentas de sus moradores y los útiles u objetos de entretenimiento junto a los que aparecen, que dan fe de la agradable vida que se llevaba en el lugar y de la posición económica de los propietarios.

Una de las imágenes más singulares y llamativas de lo que era la vida en este palacio sierense se exhibe en uno de los grandes paneles de la muestra permanente del Museo del Pueblo de Asturias que aporta, entre otras cosas, una visión de la vida de las distintas clases sociales en la Asturias de finales del siglo XIX y principios del XX.

La fotografía en cuestión la protagonizan "familiares y sirvientes de los marqueses de Canillejas en el jardín del palacio de Valdesoto" y fue tomada en 1895.

A poco que uno se fije encontrará mil y un detalles llamativos que revelan el tipo de vida que hacían en el palacete y sus entretenimientos. A la izquierda de la imagen, un grupo de varones juega a las cartas, centrado en lo suyo y ajeno a las mujeres y niños que están en el centro y a la derecha de la foto.

Varones jugando a las cartas.

Varones jugando a las cartas.

En el centro de la imagen una mujer porta un utensilio para enrollar hilo o lana junto a un joven con una bicicleta de enormes ruedas. Una mujer, que parece pertenecer al servicio por el delantal, está tras de un niño o niña que tiene un par de marionetas. Al fondo se aprecia una portezuela con una corona decorativa que remata su parte alta, dos esculturas, una a cada lado, y delante, una mesa con los sombreros de las señoras.

Escena de la parte central de la foto.

Escena de la parte central de la foto.

A la derecha de la imagen se sitúa lo que parece un matrimonio más joven con un niño. El hombre es el único separado del resto de varones que se entretienen con las cartas. La mujer borda y el niño tiene un hermoso triciclo. La estampa parece sacada de una película de época. Ampliando la foto que acompaña a estas líneas, son perceptibles todos estos detalles y alguno más que, sin duda, constituyen un documento histórico acerca de la vida de la época, del palacete sierense y sus moradores de entonces.

Pareja con el niño del triciclo.

Pareja con el niño del triciclo.