El alcalde de Siero, en el comedor de Amazon: así fue su encuentro con trabajadores y directivos

Ángel García compartió mesa, entre otros, con Carlos Ordeig, responsable de la planta de la multinacional en Bobes

Por la izquierda, Carlos Ordeig, Eva Pérez, Cristina Cartes, Paola Montero y Ángel García

Por la izquierda, Carlos Ordeig, Eva Pérez, Cristina Cartes, Paola Montero y Ángel García

M. G. S.

Cuatro meses después de que el gran centro logístico de Amazon comenzase a funcionar en el polígono de Bobes, el alcalde de Siero, Ángel García, compartió este lunes comida con directivos y trabajadores. Lo hizo en el propio comedor de la compañía, como se había comprometido meses atrás. Con un plato de pescado y un yogur natural sobre la mesa, el regidor sierense compartió la marcha del equipamiento en el concejo con Carlos Ordeig, director del centro, Eva Pérez, directora de relaciones institucionales, Cristina Cortes, manager de relaciones institucionales, y Paola Montero, del departamento legal de la multinacional.

El centro logístico de Amazon, que ocupa una superficie de 175.000 metros cuadrados y cuatro plantas, echó a andar el pasado mes de septiembre, dos años después de que finalizara su construcción y tras una inversión de unos 300 millones de euros. En él trabajan 400 empleados, pero los planes de la compañía es llegar dentro de tres años a 1.000 trabajadores. El centro recibe las mercancías procedentes de sus proveedores, entre los que hay comercios de todo tipo (electrónica moda, deportes, juguetes, libros, decoración…). Los operarios del almacén deben desembalar, clasificar, etiquetar y empaquetar los artículos, que en todo caso tendrán un peso máximo de 12 kilogramos. Es decir, por las cintas de Bobes no circulan grandes objetos como televisores o bicicletas. Desde el centro sierense partirán hacia los almacenes de "última milla", los cuales los guardarán hasta su entrega al cliente final.

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