Quejas en La Fresneda por la situación del centro de estudios: "Lo han convertido en punto de reunión social y ocio"

Colillas, preservativos, restos de cortes de pelo o hasta un carro de la compra de un supermercado cercano. Estas son tan solo algunas de las cosas que desde hace aproximadamente un mes vienen apareciendo el Centro de Estudios de La Fresneda (Siero). Algunos usuarios de las instalaciones denuncian que "los jóvenes de la zona han convertido el emplazamiento en un punto de reunión social" y aseguran que "sobre todo por las tardes es imposible estudiar".

El pasado mes de diciembre, el Ayuntamiento de Siero implantaba en el centro de estudios de la urbanización un nuevo sistema de automatización de apertura y cierre, que eliminaba la necesidad de personal subalterno para estas tareas. Este avance pretendía garantizar un uso más flexible del espacio, cuyo horario fuera de épocas de exámenes es de 10.00 a 22.00 horas, y añadía cámaras de vigilancia, tanto en el interior como en el exterior, para mejorar la seguridad.

Sin embargo, parece que esta medida preventiva no está dando los resultados esperados. Fuentes municipales señalan que "hemos recibido muchas quejas sobre el uso que determinados jóvenes están dando al espacio desde la oficina de atención al ciudadano, tanto por parte de los usuarios del centro como por la persona encargada de la limpieza y mantenimiento de las instalaciones".

Una usuaria comentaba esta misma semana que había llamado a la Policía en tres ocasiones, pero "me comentaron que es un delito menor y que tienen mucho trabajo como para acercarse hasta aquí a restablecer el orden". Lamenta que "es una pena que teniendo estas instalaciones tan cerca, no podamos hacer uso de ellas y tengamos que desplazarnos hasta otros centros, como el de Lugones, donde sí se respetan las normas".

Alejandra Cuadriello, concejala de la Plataforma Vecinal de La Fresneda (PVF) asegura que han tenido que colocar un cartel advirtiendo de la prohibición de fumar en el interior del centro de estudios y ha solicitado "la posibilidad de colocar un bando en el que se requiera que es un lugar de estudios y no de reunión". Además, barajan la posibilidad de "cerrar las instalaciones durante un tiempo como medida preventiva, si este tipo de acciones siguen persistiendo en el tiempo". La edil avanzó que la semana próxima mantendrá una reunión con el Ayuntamiento para que "se tomen medidas al respecto".