El Siero agradece su ascenso con una ofrenda floral en la Capilla de Santa Ana

Jugadores, cuerpo técnico y directiva celebran el histórico paso a Tercera RFEF con un emotivo gesto de gratitud en la Pola

El equipo del Siero, junto al párroco Fermín Riaño, en el centro, y su ofrenda floral en la capilla de Santa Ana

El equipo del Siero, junto al párroco Fermín Riaño, en el centro, y su ofrenda floral en la capilla de Santa Ana / C. V.

Pola de Siero

El Club Siero culminó su exitosa temporada con un acto cargado de simbolismo: una ofrenda floral en la capilla de Santa Ana. La visita, que reunió a jugadores, cuerpo técnico y representantes de la directiva en el templo poleso, sirvió como gesto de agradecimiento por el reciente ascenso a Tercera RFEF, logrado hace apenas unas semanas.

“Queríamos terminar esta temporada de una forma especial, efusiva y sensible, en un sitio tan emblemático para nosotros como es la capilla de Santa Ana”, expresó Eduardo Llosa, miembro de la directiva, quien destacó la emoción del momento y el valor de compartirlo en comunidad.

No se trata de una costumbre previa en el club, pero desde la entidad consideran que “un logro tan emblemático merecía también un gesto especial”, y esperan que este sea el primero de muchos actos similares en el futuro. El párroco local, Fermín Riaño, recibió al grupo y, entre sonrisas, les regaló una bendición sencilla y directa: “Que tengáis muchos éxitos y pocas lesiones”.

Tras el acto, la plantilla tenía prevista una comida para celebrar el final de temporada, pero el primer gesto fue esta ofrenda, en un claro ejemplo del sentimiento de pertenencia que el Siero mantiene con su entorno y su gente. Con el recuerdo aún fresco del ascenso y las emociones a flor de piel, el club cierra así un capítulo inolvidable, con la vista puesta en una ilusionante nueva etapa en la categoría nacional.

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