La Copa de Debutantes, un éxito en Lugones: la cita reunió a 186 niños en una gran fiesta del fútbol base

El campo de fútbol Santa Bárbara, en Lugones, se llenó este domingo de ilusión, energía y fútbol en miniatura con la celebración de la Copa de Debutantes, una cita organizada por la Real Federación de Fútbol del Principado de Asturias que reunió a 186 niños y niñas de entre 4 y 5 años, repartidos en 20 equipos procedentes de distintos puntos de la región.

Este evento, el último de los cuatro que la Federación celebra cada temporada dentro de este formato, no busca la competitividad, sino el disfrute, la participación y los valores del deporte desde las edades más tempranas. “Esto no es una competición al uso, es una fiesta”, explicó el secretario general de la Federación, Carlos García, quien destacó que todos los futbolistas cuentan con licencia federativa y reciben al finalizar un balón, una medalla y un picnic, independientemente del resultado obtenido en los partidos.

Los más pequeños dan sus primeros pasos en el fúbtol federado en Lugones

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El torneo comenzó a las 10.30 de la mañana, con una fase de grupos seguida de semifinales y finales, pero siempre con medidas adaptadas para asegurar una experiencia positiva: se limita el número de goles para evitar goleadas, se establece una línea de presión para no agobiar en las áreas, y se fomenta el juego limpio y el aprendizaje, más allá del marcador.

Participaron equipos de Colloto, Lugones, Condal de Noreña, Cangas del Narcea y otros clubes de la zona centro de Asturias. Aunque en esta edición no acudieron formaciones de lugares más alejados como en otras ocasiones, la variedad y el entusiasmo se mantuvieron intactos.

Convivencia en e deporte y entre familias

El Atlético de Lugones A fue el equipo que más puntos se llevó en este evento y tras las cuatro jornadas celebradas, en la Clasificación Final el ganador fue la Asunción CF, de Gijón.

Este tipo de eventos, que ya han pasado esta temporada por Avilés, Arriondas, Posada de Llanes y ahora Lugones, buscan también fomentar la convivencia entre familias y clubes, además de ser una primera toma de contacto para muchos pequeños con la competición federada. Como señalaba García, “algunos niños llegan al circuito sin saber muy bien hacia dónde tirar, y se van habiendo aprendido lo básico".

El año que viene, "muchos ya pasarán a Prebenjamines y ya van con otra base”. Con sonrisas, pelotas nuevas y un recuerdo imborrable bajo el brazo, los debutantes asturianos cerraron así una jornada que, sin levantar trofeos, deja claro que el verdadero premio es aprender jugando.