Opinión | El Paragües

Artificial

A mí me pone un poco nervioso. Probablemente sea fruto de la edad y la capacidad para entender situaciones que puedan hacer una transformación integral de las experiencias de la vida, aunque también es posible que la cosa pueda llegar a estar fuera de control. Me refiero a la IA (Inteligencia Artificial). He visto acciones de esta tecnología que eran impensables. Puede solicitarse que escriba una novela con unos datos que se le comunican referidos al tema, argumento, personajes, extensión de la obra... Y enseguida, está. Y como esto infinidad de cosas. Se abre un mundo complejo a las nuevas generaciones. Se pueden sustituir desarrollos creativos genuinamente humanos, es posible resolver procesos de todo tipo, desde matemáticos a constructivos y pueden originarse productos espectaculares.

La cuestión es cómo hacer un uso socialmente ético de estos recursos. Es de temer que la facilidad para conseguir resultados que de otra forma exigiría gran tiempo y esfuerzo conlleve abandono de la actividad intelectual en el sentido tradicional, de forma que la inmensa mayoría de la población sea sólo usuarios de la IA.

Por otro lado, quienes la hacen posible tendrían en sus manos el instrumento para orientar la civilización hacia sus intereses. No hay duda que reportará beneficios a la Humanidad pero también puede hacer llegar a manos desalmadas datos para hacer enorme daño. A ver si alguien por ahí consulta con la IA cómo potenciar el desarrollo mercantil y de servicios de Pola de Siero y frenar su deterioro comercial. El colmo sería que la contestación fuese "con carriles bici".

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