Pola de Siero, Franco TORRE

Los comerciantes de la plaza de abastos de Pola de Siero no pudieron acceder ayer a sus puestos hasta las diez y media de la mañana. La causa aducida para explicar el retraso fue el extravío de las llaves del inmueble.

Los encargados de abrir cada mañana las puertas de acceso al edificio de la plaza de abastos son los agentes de la Policía Local de Siero, quienes habitualmente proceden a abrir los accesos alrededor de las seis y media de la mañana. En torno a las siete, los comerciantes instalados en los puestos del mercado acceden al edificio para preparar sus comercios para la apertura. No obstante, cuando trataron de entrar en la mañana de ayer, se encontraron con las puertas cerradas y sin que hubiese allí ningún empleado municipal para explicar el cierre.

Tras una dilatada espera, algunos comerciantes decidieron ponerse en contacto telefónico con las fuerzas de la Policía Local, que dijeron que se habían extraviado las llaves del inmueble. Acto seguido, llamaron a la concejala de Comercio, Turismo, Festejos y Mercados, Ángela Llende, para solicitarle su mediación en el asunto.

Pasadas las nueve y media de la mañana, se personó en los aledaños del mercado el concejal de Urbanismo, Julio Carretero, acompañado por dos operarios municipales que procedieron a forzar las puertas del mercado, algo que no lograron hasta poco antes de las diez y media de la mañana.

Para evitar que la situación se repitiese en los días sucesivos, el edil instó a los comerciantes a hacerse con unas cadenas y candados y cerrar ellos mismos las puertas hasta que se encuentre una solución.

Pese a que la explicación oficial del retraso sigue siendo el extravío de las llaves, algunos comerciantes y clientes apuntaron la posibilidad de que fuese una consecuencia de la huelga de celo iniciada por los empleados municipales de Siero como protesta por la solución adoptada por el Consistorio para cumplir la sentencia del Tribunal de Cuentas referente a los pagos irregulares.