La Fresneda,

Manuel NOVAL MORO

El edificio administrativo de la Confederación Hidrográfica del Norte, de La Fresneda, no cumple con las exigencias de la normativa municipal. Al menos ésa es la conclusión a la que ha llegado la concejalía de Urbanismo al promover la clausura del inmueble y del aparcamiento anexo.

La Comisión informativa de Urbanismo reunida esta semana informó favorablemente la clausura del edificio y el aparcamiento, una decisión que se tomó por unanimidad.

La Confederación Hidrográfica del Norte obtuvo en marzo de 2002 la autorización provisional del Ayuntamiento de Siero para comenzar la actividad en el edificio administrativo. Dicha autorización estaba sujeta a varias condiciones.

La principal de ellas era que una vez finalizadas las obras de las instalaciones debía ponerlo en conocimiento del Ayuntamiento de Siero «mediante la presentación de certificación técnica colegiada acreditativa del cumplimiento de las medidas correctoras exigidas».

Sin embargo, pasaron los años y la certificación técnica no llegó a presentarse nunca en el Ayuntamiento. Con la llegada del socialista Julio Carretero a la concejalía de Urbanismo, se retomó el expediente y comenzó a exigírsele a la Confederación que cumpliera con los requisitos exigidos por la normativa, al igual que debía hacer cualquier vecino o empresa. El organismo, pese a ello, no llegó a presentar la certificación, y el Ayuntamiento actuó en consecuencia.

Fuentes municipales aseguraron que las medidas correctoras que se debían aplicar en el edificio no eran especialmente importantes. Se trataba de obras menores. Más que las obras en sí, el centro de la cuestión es el hecho de que pasados los años la Confederación no cuente con el certificado de fin de obra.

La propuesta de clausura del edificio, abanderada por Julio Carretero, contó con el apoyo del resto de formaciones políticas.

Todo indica que con esta decisión el Ayuntamiento de Siero pretende dar ejemplo y demostrar que todo el mundo, sin excepción, debe cumplir los requisitos exigidos por la normativa para levantar y poner en funcionamiento un edificio.

El hecho de que el organismo al que afecta la decisión trascienda el ámbito municipal e incluso regional cuyas decisiones pueden afectar a muchos proyectos y desarrollos en el concejo de Siero no ha supuesto un obstáculo para que el Ayuntamiento tomara la decisión.

Carretero se ha caracterizado desde que llegó a la Concejalía de Urbanismo por desbloquear asuntos de su área que estaban en un punto muerto, arriesgándose en ocasiones a tomar decisiones que entrañaban riesgos de controversia, como es el caso del derribo del edificio de La Petaca o esta llamada de atención a la Confederación Hidrográfica. En esta ocasión, su propuesta ha tenido el respaldo del resto de partidos, lo que la hace más firme y segura.