La vida de Ariel Rot lleva adosada un mundo de rock and roll que no se tapa siquiera cuando alguna de sus canciones tiene cierto (o mucho) run-run a cumbia, o así («Papi, dame la mano») o a baladas tranquilas. Lleva largo tiempo en la música y, por tanto, un largo recorrido por la escena española; haciendo una ruta brillante en la que viajó con «Tequila», «Los Rodríguez» y mucho tiempo en solitario. A la par que cumple su medio siglo de vida lanza «Solo Rot», un disco que nació para disponer del género en una versión lo suficientemente auténtica como para agradar a la primera audición: sin demasiadas complicaciones, eso que se define como rock de «sota, caballo y rey».

Ariel Rot se ha rodeado de músicos de confianza, entre ellos el batería Pete Thomas (muy de la escena británica), músicos de los que saben el registro pata negra del rock and roll y con alguna pequeña colaboración ilustre como los de «Pereza».

Y de sus cincuenta años de vida ya cumple treinta y tantos de músico (con otro disco, «Etiqueta Negra. 30 años de rock & roll» celebró los primeros treinta en 2007), quizá sabiendo que la gente esperaba entre tanto aniversario cosas nuevas, aunque siempre con aire Rot. Ariel Rot está aún sacudiéndose de la gira nostálgica con «Tequila» que circuló este verano por España para evocar viejos tiempos en «Las plazas de los pueblos», y repetir los «saltos» que dieron varias generaciones al golpe rítmico de la banda más stoniana que parió el rock en español (que no sólo el rock español).

En «Solo Rot» no hay complicaciones en la construcción de canciones, quizá se encuentre ese aire a blues/rock en «Manos expertas», la pieza en la que trabaja «Pereza» y que tiene un mensaje contundente a la par que festeja sus cincuenta años: «La crisis de los cuarenta la pasé tomando absenta, y ahora con diez años más yo finalmente me di cuenta, que necesito, yo necesito tus manos expertas (?)». Para esta celebración Ariel Rot ha traído a este mundo doce piezas, con distintos sabores rockeros y pizcas blueseras y latinas.

Y la edición tiene sus detalles extra para combatir el mercado digital. Por ello lleva un DVD con cuatro piezas en sesión acústica: «Papi, dame la mano» (videoclip), «Dandy», «Manos expertas» y «Salto al vacío». Completa así una abundante carrera en solitario que le ha servido para enganchar nuevos seguidores, al menos para no quedarse en fuera de juego en este primera década del siglo XXI. Aunque difícil será perder el rastro a un personaje cuya historia músical tiene capítulos con «Tequila», aquella banda juvenil formada en 1977, cuando España despertaba y daba sus primeros arreones rockeros. Y no menos gloria tiene su episodio en «Los Rodríguez», una formación que endosó un aire nuevo a la cosa rítmica latina, un sonido original en el que participaron Calamaro y el «Tequila» Julián Infante.