Oviedo

«Resultados plenamente satisfactorios». Fue la conclusión que hicieron pública los facultativos de la clínica Planas, de Barcelona, tras el chequeo al que se sometió el Rey en la última semana de abril. La operación de ayer rompió en mil pedazos aquel primer pronóstico tan favorable, emitido hace tan sólo tres semanas. Un reconocimiento cardio-circulatorio, que también afectó a los aparatos digestivo, respiratorio, neurológico, génito-urinario, locomotor y órganos de los sentidos, tal como informaba estos días la página web oficial de la Casa Real española. Los médicos aseguraron «no haber encontrado alteraciones dignas de mención» respecto de los resultados del reconocimiento médico efectuado en abril de 2009. La información era falsa, el nódulo se estaba encubriendo.