Los médicos investigan la causa de la muerte de un niño de 5 años y 50 kilos de peso que murió a causa de los problemas derivados de su obesidad. El niño falleció el pasado 2 de abril, en la unidad de cuidados intensivos (uci) del Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca, a consecuencia de los «graves problemas derivados de su obesidad», según informó la Consejería de Sanidad. Las mismas fuentes descartaron que el fallecimiento del pequeño hubiera sido a consecuencia de una operación para rebajar su peso, porque ese tipo de intervenciones no están indicadas para esa edad.

El pequeño fue atendido en urgencias del Hospital Naval de Cartagena, el 17 de marzo, por problemas derivados de su obesidad, desde donde el 18 fue trasladado, en primer lugar, al centro Virgen del Rosell y, debido a su «extrema gravedad», al Hospital Virgen de la Arrixaca, de Murcia, donde permaneció en la uci hasta su fallecimiento, el día 2.

Hasta su ingreso en Urgencias del Naval, el Servicio Murciano de Salud sólo tenía registrada una consulta al niño, realizada en el centro de atención primaria de La Unión, en enero de 2006, «por razones que no tenían nada que ver con su peso».

Fuentes médicas señalaron a «Efe» que el pequeño era tratado por el servicio de pediatría de algún centro de carácter privado o de alguna empresa de seguros sanitarios. Según fuentes cercanas al caso, el pequeño F., que fue enterrado ayer en el cementerio de La Unión, sufrió un problema cerebrovascular.

Donación de órganos

Los padres del niño han donado sus órganos, tras su fallecimiento en la unidad de cuidados intensivos del Hospital de la Arrixaca.

La concejala de Servicios Sociales del Ayuntamiento de La Unión, María Hermógenes, quien acudió a dar el pésame y a ofrecer ayuda a la familia, informó de que los padres y los abuelos, aunque han donado los órganos del niño, «están desechos» y que «no se esperaban» el fallecimiento.

Según la concejala, el pequeño ingresó por «problemas respiratorios» y estaba siendo tratado por un médico endocrino por la obesidad que padecía. El niño «estaba bien tratado y bien cuidado, tanto por la madre como por la abuela», dijo María Hermógenes, quien agregó que la familia es muy conocida y apreciada