No hay mejor escenario que el Aula Magna para presentar un libro sobre la «Historia de la Universidad de Oviedo», un proyecto que ayer alumbró el primero de los tres volúmenes de los que constará la obra, coordinado por los historiadores Aida Terrón, Carmen García y Jorge Uría. Ahonda en la primera etapa, desde la fundación de la institución académica hasta la crisis del Antiguo Régimen, o, si se quiere, entre 1608 y 1808.

No es tarea fácil, apuntó Uría, entre otras cosas por el conocido déficit documental de la Universidad. «El proyecto va a cubrir un hueco importante» pero avisó: «Esto no es una síntesis, sino una visión de conjunto que servirá de guión para que dentro de unos años alguien aborde una Historia de la Universidad con mayúsculas».

El libro, que sigue orden cronológico y temático, tiene capítulos escritos por Ángeles Faya, Javier Rodríguez Muñoz (director del Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA), Ramón Rodríguez, Baudilio Barreiro y Lola Mateos, además de un último capítulo con apéndices considerados imprescindibles para entender estos primeros dos siglos de vida universitaria.

La profesora Faya recorre la figura de Valdés Salas en el contexto de su tiempo, las obras pías del fundador relacionadas con Asturias, y muy en concreto con Salas, su villa natal, y las dificultades de todo tipo que supuso erigir la Universidad.

Javier Rodríguez Muñoz aborda el desarrollo institucional de la Universidad, sus dotaciones y sus rentas (pocas), a la vez que todo los relacionado con los primeros profesores y alumnos.

El director de la Biblioteca de la Universidad, Ramón Rodríguez, escribe sobre las infraestructuras universitarias y el establecimiento de la Biblioteca de la entidad. El profesor Baudilio Barreiro indaga en la proyección social de la Universidad y la «clientela universitaria», mientras que Lola Mateos pone broche de oro con una aproximación al Siglo XVIII, que tan bien conoce, y la relación con el Reformismo Ilustrado.

Ángeles Faya repasó los contenidos del libro, desde los inicios mismos, reflejándose en el espejo de la Universidad de Salamanca, hasta los albores del siglo XIX. Hubo, como no podía ser menos, un tributo a Fermín Canella, el rector del tercer centenario y autor de una historia universitaria que necesariamente ha sido pieza fundamental a la hora de abordar la obra ayer presentada en el Aula Magna.

A la luz de todas estas páginas comprendemos que elegir rector nunca ha sido fácil y que la penuria económica fue permanente. «Como rector -dijo Juan Vázquez, quien presidió el acto- me voy con la tranquilidad de dejar el proyecto en marcha», a la vez que emplazó a Jorge Uría para seguir con la tarea de preparación de los dos volúmenes próximos, «que yo no veré como rector y espero ver como profesor».

«Escribir la historia es un modo de escribir el futuro. Uno tiene que conocer bien esa historia, sobre todo si, como nosotros, quiere celebrarla». Y ya que se va del cargo, Juan Vázquez no dudó en postularse: «Si necesitáis autor para escribir la historia más reciente, contad conmigo».