Oviedo, Efe

Las farmacias asturianas exigirán a partir del próximo 1 de junio la presentación de la tarjeta sanitaria a la hora de retirar los medicamentos, además de la correspondiente receta manual emitida por el médico, según informó ayer la Consejería de Salud y Servicios Sanitarios. Esta medida responde a un requisito establecido en el concierto firmado por el Colegio de Farmacéuticos y la Consejería que entrará en vigor en esa fecha.

Según las mismas fuentes, el fichero de datos de tarjeta sanitaria que se va a generar se ajusta a lo dispuesto por la ley orgánica de Protección de Datos de Carácter Personal. De acuerdo con lo establecido en el concierto, la no presentación de la tarjeta sanitaria en el caso de las recetas hechas a mano justificará la no dispensación de la receta por la farmacia. Las boticas estarán obligadas a que se presente la tarjeta sanitaria del paciente que figura en la receta, para tomar sus datos por medios informáticos. Se han editado carteles informativos que han sido colocados en las farmacias y centros de salud para garantizar el conocimiento de la norma a los usuarios.