Los Ángeles, Agencias,
A. M. G. / E. F.-P.
La familia y los amigos más cercanos de Michael Jackson se reservaron las primeras horas del día para despedir al artista. Lo hicieron en una ceremonia íntima, antes del multitudinario funeral en el Staples Center. El acto tuvo lugar en el cementerio Forest Lawn, en las colinas de Hollywood, en el que están enterradas celebridades como Humphrey Bogart y Sammy Davis Jr. y que es una de las paradas obligadas de los circuitos turísticos por Los Ángeles, aunque las tumbas de las celebridades enterradas están preservadas de la curiosidad en locales privados que no pueden ser visitados por extraños.
El funeral privado comenzó con media hora de retraso. Hacia las ocho y cuarto de la mañana, hora local, llegó al camposanto una caravana de automóviles negros con cristales tintados, escoltada por una patrulla de tráfico de la Policía de Los Ángeles. De los coches descendió un centenar de personas, entre ellas la madre de Jackson, Katherine, en compañía de los tres hijos del «rey del pop», Paris Katherine, Prince Michael I y Prince Michael II Blanket. También fueron vistos el padre de Michael, Joe, y su hermana Janet y su hermano Jermaine, muy afectados, que tuvieron que ser consolados y abrazados por sus allegados. A pesar del carácter íntimo del funeral de la familia, según la cadena de televisión CNN, asistió un millar de personas.
El acto duró menos de una hora. Finalizó hacia las 9 de la mañana, hora local, y hora y media después, arrastrando los 30 minutos de retraso, el féretro cubierto de rosas rojas con los restos mortales de Jackson llegaba al estadio de los Lakers. Durante sus trayectos por las calles de Los Ángeles los automóviles de la familia circularon escoltados por un fuerte dispositivo policial e incluso se cortaron las carreteras al tráfico a su paso.
El destino definitivo de los restos de Michael Jackson sigue envuelto en el misterio. «The New York Post» publicaba ayer que, una vez concluido el funeral privado, sería incinerado para esparcir sus cenizas por su rancho de Neverland, tal como parece ser que él deseaba.
