Oviedo, Pablo ÁLVAREZ

A la Universidad de Oviedo no le salen las cuentas: le faltan unos cuatro millones de euros para hacer frente al pago de las nóminas de sus trabajadores en lo que queda de año. El equipo rectoral ha solicitado al Gobierno regional una aportación adicional que le permita realizar los abonos. Pero, según ha podido saber este periódico, el Ejecutivo no está por la labor de responder afirmativamente, al menos por el momento y en tanto estudia las cifras facilitadas por la institución académica.

No obstante, la negociación está abierta y las reuniones se sucederán en los próximos meses. Como alternativa, los dirigentes universitarios barajan «recurrir al endeudamiento». En todo caso, «los trabajadores de la Universidad percibirán sus haberes», en palabras del vicerrector de Planificación Económica, Santiago Álvarez.

El rector, Vicente Gotor, y su equipo están abocados a cuadrar el círculo en materia económica. El presidente regional, Vicente Álvarez Areces, ya les ha advertido de que para el próximo año han de ir diseñando un presupuesto de la misma cuantía que el del presente ejercicio. Al menos, la partida que aportará la Administración autonómica no aumentará. Este mensaje de máxima austeridad ya ha sido transmitido por Gotor a los decanos y a los directores de departamento.

El rector enfatiza las dificultades que entraña llevar a la práctica este ejercicio de restricción en plena implantación del «plan Bolonia», que va a exigir «la contratación de profesores en determinadas áreas». «No podemos incorporarnos a Bolonia a coste cero», indica Gotor.

Pero el desafío más inmediato para la Universidad de Oviedo no se refiere a 2010, sino al modo de afrontar lo que resta de 2009. El vicerrector de Planificación Económica afirma que las proyecciones de gasto a estas alturas del año ya son lo suficientemente precisas como para detectar severos problemas en el abono de las nóminas del personal. Tanto Santiago Álvarez como Vicente Gotor subrayan «el esfuerzo de contención del gasto que estamos haciendo, y que el Principado conoce y valora». Sin embargo, esta dinámica restrictiva no está siendo suficiente.

A las arcas de la Universidad de Oviedo les faltan unos cuatro millones de euros para cubrir los gastos de personal en lo que queda de 2009. Esta cifra es ligeramente inferior a la cuantía que la Consejería de Educación del Principado recortó de las pretensiones iniciales del equipo de Gotor para 2009. «Hemos podido reducir gastos de determinadas partidas, pero en el capítulo de personal no podemos hacer más», señaló Santiago Álvarez, quien destacó el incremento de los costes derivados de los diversos complementos salariales que percibe buena parte del personal de la institución universitaria en concepto de trienios de antigüedad, quinquenios de docencia y sexenios de investigación.

Estos complementos -prosiguió el vicerrector de Planificación Económica- dificultan sustancialmente las pretensiones de contención presupuestaria. Aunque el sueldo de los funcionarios fuese congelado, los mencionados pluses salariales implicarían un aumento del gasto en personal de 1,7 millones de euros a lo largo de 2010.

La plantilla de la Universidad de Oviedo está integrada actualmente por 3.044 trabajadores: 2.132 de docencia e investigación y 912 de administración y servicios (405 laborales y 507 funcionarios). El «plan Bolonia» requerirá más contrataciones.

Una congelación salarial para 2010 supondría un incremento del gasto en personal de 1,7 millones de euros debido a los diversos complementos retributivos. Si los sueldos subieran un 0,5%, este capítulo aumentaría en 700.000 euros más.