Gijón, J. C. G.

La decisión de trabajar con el actor Mark Duplass, cuyo talento la había impresionado, está en el origen de «Humpday», comedia que la prensa premió con aplausos merced a la frescura y honradez de su directora, la norteamericana Lynn Shelton, que ha querido alejarse «tanto de la comedia romántica como de la "buddy movie"». «La idea era muy simple: coger unos personajes y sacarlos de su zona de comodidad, y qué es más incómodo para dos heterosexuales que tener relaciones homosexuales», comentó la cineasta, que narra cómo el proyecto de rodar un vídeo porno para un festival amateur altera la relación entre dos amigos que se acaban de reencontrar y la esposa de uno de ellos.

El trabajo actoral sustenta un proyecto basado «en una estructura narrativa muy sólida» a partir de la cual los intérpretes pudieron improvisar, a fin de «preservar la naturalidad» que rezuma la cinta. «Humpday» concedió libertad a los actores hasta el punto de que fueron ellos mismos, y su actitud en la escena final de la cinta, cuando se reúnen en un hotel para rodar el porno, los que decidieron la culminación de la película. Curiosamente, Shelton acabó rodando una película para el citado festival.