Madrid

La estrategia estatal de innovación se propone colocar en 2015 a España, ahora en el puesto 19.º entre los países más «innovadores», en el noveno lugar, y para ello es necesario movilizar 6.000 millones de euros de inversión privada en I+D (investigación y desarrollo), duplicar el número de empresas que innovan y crear medio millón de empleos.

La ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, presentó ayer en el Consejo de Ministros un informe sobre esta estrategia, que implicará a trece ministerios y que comprende un conjunto de actuaciones que se desarrollan en torno a cinco grandes ejes: el de la financiación, el de los mercados, la internacionalización, la cooperación territorial y el de las personas.

La Ministra quiere «incentivar y facilitar» las actividades innovadoras con la mejora de las herramientas de financiación pública y la promoción de instrumentos diversos con participación del sector privado, como la financiación bancaria, el capital riesgo o los mercados secundarios de Bolsa. Se definirán actuaciones orientadas a buscar el consenso entre administraciones para lograr una difusión de la innovación en todo el territorio, con especial énfasis en las pequeñas y medianas empresas.

Se constituirá una comisión de seguimiento de la estrategia estatal de innovación, que será presidida por el Ministerio de Ciencia e Innovación.