El Club de Fumadores por la Tolerancia recogió en Asturias 14.696 firmas contra la Ley Antitabaco, lo que sitúa al Principado en la cuarta posición --tras Madrid, Cataluña y la Comunidad Valenciana--, en cuanto a apoyos contra la prohibición total del consumo de tabaco en todos los lugares públicos cerrados.

Según informó el Club de Fumadores por la Tolerancia en declaraciones a Europa Press, ya se ha puesto en marcha una plataforma en Internet, www.prohibidoprohibir.org, cuyo principal objetivo es reunir a todos los fumadores mayores de edad que andan por la red para recoger firmas en contra del endurecimiento de la ley anunciado por la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez. Uno de los principales objetivos de la plataforma es demostrar el descontento generalizado que hay, sobre todo en el sector de la hostelería, por el anuncio de la prohibición total. En la actualidad, ya se han recogido las 320.000 firmas en tres meses, y esperan superar las 500.000.

La asociación está desarrollando buena parte de su actividad para frenar el endurecimiento de la Ley en Internet. Así, el Club de Fumadores por la Tolerancia tiene hace tiempo su página en Facebook, en Twitter y dispone de un canal en YouTube, con los que informa a diario de las novedades que surgen en torno a la amenaza de prohibir totalmente el consumo de tabaco en todos los lugares públicos cerrados.

De acuerdo con la encuesta 'Tolerancia y Cortesía', elaborada por Clau Consultors para el Club de Fumadores por la Tolerancia, el 86,5 por ciento de los ciudadanos de Asturias está de acuerdo con que los fumadores tengan un espacio donde poder fumar. Según indicaron, estas cifras se contradicen con lo que se está diciendo desde el Ministerio de Sanidad y Protección Social. Así, aseguran que los asturianos están en contra de una prohibición total de fumar en hostelería: el 54,1 por ciento de la población dejaría la ley como está o, incluso, la suavizaría.

La convivencia entre fumadores y no fumadores en Asturias se rige por pautas de "respeto y tolerancia": el 79,7 por ciento de los no fumadores asturianos asegura no sentirse nada o poco molestos si se fuma en su presencia, mientras que sólo el 13,2 por ciento de los fumadores se ha sentido rechazado en algunas o en muchas ocasiones. Sólo un 27,6 por ciento de los no fumadores asturianos no va nunca a zona de fumador cuando llega a un restaurante acompañado de fumadores y sólo un 39,7 por ciento de los fumadores asturianos elige siempre zona de fumadores cuando van acompañados de no fumadores.

Según la asociación, la encuesta permite concluir que la prohibición, de entrar en vigor, lejos de ser una solución incide en una nueva problemática derivada del consumo de tabaco: 'el cigarrón'. Así el 77,6 por ciento de los fumadores asturianos afirma que, en caso de prohibición, saldrán a la calle a fumar, con el consiguiente problema de desórdenes públicos y molestias a los vecinos.

¿QUÉ ES EL CLUB DE FUMADORES POR LA TOLERANCIA?

El Club de Fumadores por la Tolerancia es una entidad de carácter privado, fundada en 1.995, sin ánimo de lucro. Está constituido por fumadores y no fumadores que creen en la tolerancia como elemento fundamental de convivencia. Lejos de hacer proselitismo para conseguir que la gente fume más o que se incremente el número de fumadores, lo que pretende es que no se limiten las libertades individuales de hacerlo.

El Club de Fumadores por la Tolerancia está presidido por Antonio Mingote. Sus socios fundadores son: Antonio Burgos, Carmen Rico Godoy, Javier Marías, Moncho Alpuente, Luis Antonio de Villena, Miguel Ángel Gozalo, Alfonso Ussía, Fernando Savater, Luis Blanco Vila, José Julián Barriga Bravo, Salud Hernández Mora, Julián Uceda, Raimundo de los Reyes y Fernando Vizcaíno Casas.

Cerca de 100.000 socios y simpatizantes en toda España, fumadores y no fumadores, integran el Club. Entre ellos, Rosa María Sardà, que fue nombrada socia 50.000 en un acto celebrado en Barcelona y Concha Velasco, socia 35.000, en Madrid. Sin hacer apología del tabaco, el Club aboga por descriminalizar el hecho de fumar.

Por ello, tiene entre sus objetivos prioritarios conseguir que la decisión de fumar o no fumar sea una opción libre y que se respeten los derechos de los adultos que libremente han decidido fumar, sin que sean discriminados por su condición de fumador. Persigue evitar que España caiga en actitudes como las que en otros países, bajo el lema de 'fundamentalismo de la salud', han hecho del fumador un 'apestado' en la sociedad. El Club pretende que los fumadores sean corteses con los que no fuman y éstos tolerantes con los que lo hacen. Defiende que los conflictos que pudieran surgir entre ambos colectivos se resuelvan con el diálogo y la buena educación.

EUROPA PRESS