Washington, Efe

«La labor de los emprendedores cambia los patrones de los problemas sociales», afirmó Bill Drayton, fundador de la organización Ashoka y ganador del premio «Príncipe de Asturias» de Cooperación Internacional, fallado ayer. Drayton sostiene que este galardón es un reconocimiento de los emprendedores sociales como una nueva herramienta para provocar cambios en el mundo.

El premio «Príncipe» incluye una dotación de 50.000 euros (73.000 dólares), que Drayton quiere destinar a su programa «Ashoka Jóvenes Changemakers», que cuenta con unos 3.000 equipos de jóvenes en todo el mundo, y que realiza actividades en cinco o seis ciudades de España. El programa procura que los niños y jóvenes aprendan desde una edad temprana que ellos pueden encabezar el cambio social.

«Si tu niño o niña viene de la escuela y te dice que ahí no tratan bien a los inmigrantes, pues dile: "Haz algo para cambiarlo"», señaló Drayton. «La idea es educar a los jóvenes en la conciencia de su potencial y de su poder para cambiar las cosas que vean injustas o para ofrecer soluciones a los problemas que encuentran», añadió.

La semana pasada, en España, el programa incorporó a su nuevo miembro, Pedro Jiménez, quien presentó un proyecto titulado «Goles por una vida mejor». «El proyecto comenzó cuando Pedro, un joven de 17 años, volvió de un voluntariado de verano que había realizado en Ciudad Bolívar, Bogotá para la Fundación Colombianitos», relató Drayton. Allí «comprobó que los jóvenes con los que compartió ese verano tenían muchas carencias, algunos de ellos no poseían más que un par de zapatos».

De vuelta en Madrid, a Pedro se le ocurrió que si recolectaba todos los pares de zapatillas que sus compañeros ya no utilizan y los enviaba a la Fundación Colombianitos, «los jóvenes no dejarían de ir a jugar al fútbol y podría contribuir con ofrecerles una oportunidad de mejora», señaló Drayton. De este modo, «Pedro se volvió un joven emprendedor social al organizar, junto a tres amigos, una iniciativa que busca cambiar algo que no le gustaba en el mundo».