Oviedo, Eduardo GARCÍA

Un proyecto asturiano de investigación sobre las leucemias infantiles acaba de lograr uno de los dieciséis contratos nacionales promovidos por la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). La investigación va a ser desarrollada por Rocío González Urdinguio, de la unidad de epigenética del cáncer del Instituto Universitario de Oncología del Principado de Asturias (IUOPA).

Desde su laboratorio en el HUCA de Oviedo, la investigadora Rocío Urdinguio explicaba ayer los objetivos últimos de un proyecto que estará dirigido por Mario Fernández Fraga. «Se trata de buscar una terapia para las alteraciones epigenéticas de las leucemias infantiles a partir de un fármaco que ya existe, pero que nunca se ha aplicado a este tipo de enfermedades». Las leucemias son el tipo de cáncer más habitual entre la población infantil. Se busca, por tanto, una aplicación terapéutica frente a las alteraciones celulares.

El contrato supone el pago de un salario al investigador durante un período de tiempo mínimo de tres años, ampliable a cinco. La AECC repartió este año 12 millones de euros en los diferentes proyectos de investigación que superaron el filtro de la Agencia Nacional de Evaluación. El de la unidad de epigenética es el único proyecto asturiano beneficiado. En tiempos de crisis, el presupuesto de la AECC no se ha visto reducido. Menos mal.

Rocío Urdinguio es cántabra, se licenció en Medicina en la Complutense de Madrid y se doctoró a la sombra del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), donde trabajó cinco años. Lleva dos en Asturias, trabajando sobre epigenética del cáncer.

El proyecto, financiado desde la Asociación Contra el Cáncer, es de nuevo cuño. La epigenética estudia las alteraciones en la regulación de los genes. Es el campo de actuación de Rocío Urdinguio, cuya tesis doctoral versó sobre una extraña y muy grave enfermedad neurológica, el síndrome de Rett, también asociado a pacientes infantiles.

Las investigaciones sobre cáncer en niños cobran trascendencia por su singularidad. «Cuando hablamos de cánceres infantiles es difícil acostumbrarse a la idea. Se te pone la carne de gallina. En el laboratorio te aíslas, pero sólo un poco. Es bueno no olvidarse de que tras una muestra analítica hay una persona», recuerda la investigadora cántabra.

La ayuda de la fundación científica de la Asociación Contra el Cáncer fue entregada la pasada semana en Zaragoza, en un acto presidido por la Princesa de Asturias, Letizia Ortiz. El proyecto asturiano lleva por título «Alteraciones epigenéticas de las histonas en leucemias infantiles. Tratamiento con fármacos epigenéticos». Las alteraciones epigenéticas son una de las principales causas moleculares del cáncer. Estas alteraciones incluyen las modificaciones químicas producidas en unas proteínas llamadas histonas, que se encuentran en contacto directo con el ADN.