Berlín, Elena GARUZ

El veterano actor sueco Max von Sydow, nominado a un «Oscar» por «Tan fuerte, tan cerca», aprovechó su presencia en la Berlinale para mirar hacia atrás en su dilatada carrera y agradecer las oportunidades que le ha dado la vida. «Es una profesión apasionante, la vida me ha mimado. Gracias a Dios he tenido oportunidades, todo gira en torno a las oportunidades. Si no tienes oportunidades no puedes demostrar nada de lo que sea que hayas hecho con tu talento», declaró el artista en una conversación con un reducido grupo de medios.

El actor, que cumplirá en abril 83 años, afirmó que «estoy interesado en la gente, en la historia y en nuestro mundo tal y como es y tal y como debería ser». Von Sydow reveló un pequeño secreto: «Si se me pudiera cumplir un deseo en la vida, sería apretar un botón y ser capaz de hablar y entender cualquier idioma».

Von Sydow presentó en Berlín, fuera de concurso, la película «Tan fuerte, tan cerca», dirigida por el cineasta británico Stephen Daldry y nominada a los «Oscar» por partida doble: a la mejor película y al mejor actor secundario por la interpretación del actor sueco. La cinta es una adaptación del libro del mismo título escrito por Jonathan Safran Foer y habla del sufrimiento causado por los atentados del 11-S a través de la mirada de un niño, encarnado por Thomas Horn. En el filme no habla. «Dije mucho», señaló de su papel, y agregó: «Fue interesante porque fue diferente, diferente a papeles normales, fascinante, lo disfruté mucho».

Von Sydow habló con cariño y admiración de Ingmar Bergman. «Es el que más significó para mí, y aprendí mucho de él. Le echo de menos, le debo tanto, fue una experiencia extraordinaria y única trabajar con él, porque fue una gran inspiración a muchos niveles», dijo con agradecimiento.

Hizo tantas películas con el cineasta sueco, fallecido en 2007, que no pudo decir cuál de ellas fue su preferida, porque cada una fue «muy importante».

«Fuera cual fuera la tarea que te diera, lo admirabas tanto y te inspiraba tanto que querías hacerlo lo mejor posible. Todo (con Bergman) fue extraordinariamente importante para mí, probablemente la cosa más importante que me ha pasado en mi vida profesional», aseguró.

Si tuviera que elegir una película sería probablemente «Pelle el conquistador», del cineasta danés Bille August, «una historia maravillosa» que se llevó el «Oscar» a la mejor película de habla no inglesa en 1989 y «un papel maravilloso también» que le valió una nominación a mejor actor.

«Una de las cosas apasionantes de actuar es que cada nuevo personaje que tienes que representar es una nueva personalidad, es como si tuvieras nuevos amigos».