Barcelona, Europa Press

La Generalitat de Cataluña ha tomado el mando de la dirección del Hospital de la Santa Cruz y San Pablo de Barcelona, tras destituir al gerente del centro, Jordi Varela, con el objetivo de seguir de cerca las cuentas del hospital, que el año pasado acumuló un déficit de 18 millones de euros y se vio obligado a suspender la aplicación de un expediente de regulación de empleo (ERE) vigente desde noviembre por una denuncia de los trabajadores.

Las consejerías de Salud y Economía han creado una comisión de control de gestión para analizar la situación económica del centro y, previsiblemente, dictarán medidas de ajustes extraordinarias para equilibrar las cuentas del hospital. Ahora, dirección y patronato del hospital deberán formular un plan económico y financiero de reequilibrio, así como un informe de las causas del déficit.

Tras la suspensión del ERE temporal -de 15 días de jornada y sueldo hasta final de año para la mitad de la plantilla-, el secretario del comité de empresa del hospital, Jaume Roca, celebró con un «ya era hora» el cese de Varela al frente del hospital.