Londres, Efe

Algunos de los actores de las películas de «Harry Potter» estuvieron ayer presentes en la apertura de los estudios londinenses donde se grabaron los filmes, en lo que promete ser una de las mayores atracciones turísticas del Reino Unido.

Rupert Grint, que interpreta al pelirrojo Ron Weasley; Tom Feldon, que encarna al malvado rubio Draco Malfoy, y Bonnie Wright, la joven Ginny Weasley (hermana de Ron), estuvieron en la apertura de los estudios Warner Bros, cerca de Watford, al norte de Londres. Desde ayer, tanto niños como adultos podrán adentrarse en el mundo del niño mago creado por la escritora J. K. Rowling y que Warner Bros ha recreado para filmar las ocho películas de «Harry Potter». El interés por ver todos los detalles de la filmación es tal que las entradas ya están agotadas para los próximos dos meses, a pesar de que entrar a los estudios costará 28 libras (33,5 euros) para los adultos y 21 (25) para los niños.

Los estudios tienen 14.000 metros cuadrados y los visitantes podrán ver los escenarios de las películas, contemplar los miles de objetos mágicos creados, como varitas y escobas, y descubrir algunos de los trucos de efectos especiales que han maravillado a millones de espectadores durante una década. «Esto es lo más increíble que yo haya visto en Watford. Es emocionante para todos. Hay muchos recuerdos y compartirlos con todos es fantástico», subrayó Rupert Grint. «Es hoy todo tan mágico como lo fue entonces», agregó el actor, de 23 años, al recordar los tiempos de filmación.

La visita dura aproximadamente tres horas. Empieza desde el momento en que unas grandes puertas de madera se abren para dar paso al majestuoso Gran Salón de la escuela de Hogwarts. Además del Gran Salón, el tour también muestra la habitación de Potter en la torre de Gryffindor, el despacho del director de la escuela, Albus Dumbledore, la clase de pociones con centenares de frascos e ingredientes o la guarida del gigante bonachón Hagrid.

Además de los escenarios de las películas, miles de objetos como escobas voladoras, libros antiguos, pelotas de «quidditch» o símbolos de la saga como la piedra filosofal o el cáliz de fuego se exhiben para demostrar al público el laborioso trabajo artesanal previo al rodaje de cada filme. La visita también explica algunos de los efectos especiales utilizados para recrear los hechizos, las explosiones o las fantásticas criaturas como dragones o arañas gigantes.