«Marea» de rock de oro en la Feria

Y la marejada, de poesía rockera, aterrizó en Gijón. Cual «bandoleros a caballo», como reza una de sus canciones, llegaron al recinto ferial Luis Adaro los componentes de «Marea», para presentar en directo al público, proveniente de toda Asturias, su último trabajo, «En mi hambre mando yo». Y lo hicieron exultantes, a punto de recibir el disco de oro por el éxito de ventas y registrando lleno tras lleno en su gira por toda España.

Gijón correspondió con el calor de más de 2.000 almas al ardor de la poesía de Kutxi Romero, letrista y líder del grupo navarro, que saludó con un «¡Puxa Asturies!» acompañado por el rock bandolero de dos guitarras, un bajo y una batería. Un calor que ya se hacía notar horas antes del concierto a la entrada del recinto ferial. A las 8.30 horas llegaron, esperando encontrar a más incondicionales, Christopher Fernández y Sarah Mauri. Eran los primeros. Aun así, la visita de «Marea» bien merecía el madrugón. «Me habían dicho que iba a venir gente incluso el día anterior, por eso vine tan temprano», confesaba Fernández, que tuvo que aguantar horas de lluvia antes de entrar. Eso sí, le acompañaban un buen número de amigos, llegados de Luarca e, incluso, de Madrid. «Sus letras son lo que más me gusta», confesaba Esther García. Un poco más allá, esperaba otro grupo de amigos procedentes Nava. «Nos gustan mucho. Son muy buenos, y las letras, muy personales. Además no son nada comerciales», destacaba Mateo Ornia. El grupo «Belo y Los Susodichos» calentó a los asistentes antes de la salida de «Marea». Cuando saltaron los navarros se desató la locura. Incluso les lanzaron una camiseta del Sporting.

Los versos de Kutxi -que se presentó, como siempre, con sombrero y enseñando pecho- calaron más que la lluvia en los asistentes al concierto, que, afortunadamente, fue bajo techo. Empezaron fuerte, con «Bienvenido al secadero», uno de los grandes éxitos de su último disco, al que siguieron «La majada» y «Duerme conmigo». Y siempre con la complicidad de un público al galope con la poesía de los bandoleros navarros.