Oviedo, E. G.

«Con vuestro esfuerzo y dedicación ganamos todos, nos fortalecemos y enriquecemos». Las palabras fueron dirigidas a los chicos y chicas (más chicas que chicos) que ayer recibieron los premios extraordinarios de fin de Bachillerato y Formación Profesional. El escenario, el palacio de Porlier, en Oviedo, y entregando los diplomas la consejera de Cultura, Ana González, y el presidente de la Junta General del Principado, Pedro Sanjurjo.

En un sistema educativo donde se prima el café para todos, la excelencia no siempre se mima. Ana González sabe que «vuestro éxito es el resultado de una carrera de fondo, no de una noche sin dormir». Los jóvenes que ayer recogieron su premio forman parte de esa «otra» juventud que es mucho más que consumidora de ocio. La Consejera les pidió evitar y superar «esa imagen de desesperanza hacia el presente y el futuro inmediato» que transmite la sociedad y se encargan de propagar los tiempos difíciles que vivimos. Frente a la tentación de desesperanza «la formación es el mejor antídoto».

Lo de ayer fue una pequeña fiesta académica en la que participaron los mejores expedientes de la Secundaria asturiana pero sobre todo sus familias. Cuando al final del acto se sugirió a los presentes una foto de grupo en la plaza de Porlier había más cámaras que homenajeados. Ana González dio las gracias a las familias, por su apuesta y aliento. «Que vuestras familias y vuestros centros también se sientan tan orgullosos como vosotros».