Cuando nació el musical "El alma de la melodía" lo hizo sobre dos pilares: un guión con una historia ágil y que se pueda cantar y una banda sonora que se apoyara en grandes éxitos de los grandes clásicos de la escena. David Serna, el autor del guión, le ha dado la vuelta y adapta el musical a un libro con ilustraciones de Toño Velasco: "Es una novela basada en la historia que se vio en escena; la adaptación al revés. Cogí "El alma de la melodía" de los escenarios y la adapté a un libro. Es diferente, porque tiene personajes nuevos, situaciones nuevas, tramas nuevas", puntualiza Serna, que añade que es "ficción pura y dura, es el argumento del musical, lo mismo, pero en novela", señala.

En realidad todo surgió de otra idea que rondó por la cabeza de David Serna durante un tiempo: "La original era hacer un cómic. Se lo comenté a Toño Velasco, pero finalmente decidimos hacer una novela ilustrada; buscamos y al final se me ocurrió "El alma de la melodía"", precisa Serna, que comenzó con el proyecto en marzo del año pasado.

"El alma de la melodía" ha conseguido conectar con el público desde su estreno en el teatro Jovellanos de Gijón en el verano de 2012. Posteriormente celebró sesiones con éxito en Oviedo y Pola de Siero. El musical tuvo un considerable éxito en los escenarios que recorrió fuera de Asturias, como en Cuéllar, Ávila o, al finalizar el año 2013, en Bilbao, en el teatro Arriaga, donde conquistó al público en todas las representaciones.

El musical recoge en su banda sonora piezas muy celebradas de musicales tan aplaudidos como "Chicago", "West Side story" y "Jesucristo superstar" y relata la lucha por recuperar la esencia y las bondades de la música. "La historia de siempre entre buenos y malos", pero diseñada para recorrer el mundo repasando géneros musicales y éxitos.

La obra ha funcionado muy bien en Asturias y en el resto de España. Ahora, en la novela, se aportan nuevas aventuras, personajes nuevos, más protagonistas que recorren más países del mundo. Van a Cuba, cantan en "Graceland", el santuario de Elvis en Memphis; van a Viena al escenario del concierto de Año Nuevo, París, Dakar...". La novela es un vehículo que expone ritmos musicales, "incluso al final "hay un glosario explicando los nombres, sea bolero, ska, Elvis o Mozart", matiza Serna.

Y, evidentemente, cuenta el autor, esto hace que se citen muchas canciones y grupos como "The Beatles" o los "Rolling", y también que se homenajee a Asturias y a España. Es tan global que hay guiños para todos", puntualiza.

Como bien reza el subtítulo del libro "Un viaje a través de la música", que, entre otras cosas, recupera géneros, voces y ritmos de distintos lugares del planeta.