El recorrido de la sangre por todo el cuerpo, lo que sucede con los pulmones cuando se fuma, el feto desde las tres semanas de vida, la representación de un infarto cerebral, esqueletos humanos y uno de un oso. Son algunas de las representaciones que pueden verse en la exposición "Human bodies", un viaje a lo que la piel esconde, el complicado y misterioso engranaje del cuerpo humano, que se inaugura hoy en la sala Sabadell-Herrero, en Oviedo.

La muestra es novedosa porque exhibe hasta doce cuerpos completos y más de 150 órganos humanos, mayoritariamente de procedencia asiática, conservados mediante la técnica de la plastinación, que hace posible su preservación y exposición al público sin que el aspecto original se vea modificado.

"Lo hemos hecho de la forma más didáctica posible. La idea inicial era reproducir la serie de animación televisiva 'Érase una vez... el cuerpo humano'. Hemos combinado lo didáctico con el rigor y es fundamental el papel de la audioguía con la que se realiza la visita", afirma Rafael Latorre, catedrático de Anatomía Veterinaria de la Universidad de Murcia y director científico de la muestra. El equipo de Latorre es referencia mundial en plastinación, técnica de grandes posibilidades.

En la actualidad, según explica el profesor, colaboran con el Museo de Arqueología Submarina de Murcia procesando defensas de elefantes de época fenicia, hallados en pecios de la costa murciana, conservados en agua y que ahora se están planteando plastinar. También colaboran con el Centro de Mínima Invasión Médica y Veterinaria "Jesús Usón" de Cáceres. "Hemos introducido el empleo de órganos plastinados para estas técnicas y los resultados son muy buenos", afirma Latorre.

En las primeras salas de "Human bodies" pueden verse los esqueletos de un humano y un oso, ambos plantígrados y más parecidos de lo que inicialmente podría pensarse, aunque también con notables diferencias.

La pieza de la que el equipo científico está más orgulloso, por su dificultad, es la que explica el recorrido de la sangre por todo el cuerpo. En la exposición se denomina "Sistema arterial de cabeza, tronco y extremidades". La técnica empleada es la corrosión del sistema vascular en un cadáver completo y se ha logrado una imagen espectacular del sistema circulatorio.

Otra de las más populares y vistosas es la de los pulmones ennegrecidos por el tabaco. Varias pantallas complementan con titulares lo que revelan los órganos. "Los estudios demuestran que los fumadores pierden siete minutos de vida cada vez que fuman un cigarrillo", se lee en una. Y en otra: "Cada día mueren en nuestro cerebro más de 100.000 neuronas que nunca se reponen. En una borrachera se llegan a perder varios millones".

La obesidad, epidemia de este siglo; el cáncer, el tabaco. La exposición permite ver la diferencia entre tener buenos hábitos de salud y carecer de ellos. También informa. Pequeños mensajes que tratan de hacer pensar : "Casi la mitad del agua que bebemos la expulsamos a través de la respiración" o "Al toser, el aire puede salir a una velocidad de 140 km/h".

Organizada por Musealia, con la colaboración del Ayuntamiento de Oviedo y la Consejería de Cultura, la exposición se presentó ayer en un acto en el que Rafael Latorre dirigió a los representantes institucionales un recorrido explicativo por todo el itinerario.