Siete hospitales concertados de Cataluña -Granollers, Vich, Sant Celoni, La Seu d'Urgell, Berga, Sant Pere de Ribes, Campdevànol y Blanes- han instalado butacas en las que los acompañantes de los pacientes tienen que pagar 5 euros por noche si quieren dormir en la habitación con la butaca reclinada como si fuera una camilla.

Tener que pagar por reclinar estas butacas, que comercializa la empresa catalana Decam de Sant Feliu de Guíxols (Gerona), ha motivado las quejas de algunos acompañantes de estos hospitales, que ven este nuevo servicio como discriminatorio hacia las personas que no pueden pagarlo.

La directora de Economía y Servicios del Hospital de Granollers (Barcelona), Carme Padullés, ha reconocido a "Efe" que han recibido 17 quejas de acompañantes por tener que pagar por reclinar la butaca, aunque ha señalado que son muchas más las peticiones para hacer uso de este servicio, y ha subrayado que el número de quejas por ello es "ínfimo" comparado con las que recibe por las listas de espera.

Padullés ha explicado que decidieron instalar estas modernas butacas, que sólo se pueden reclinar si se introduce una tarjeta previo pago de 5 euros por noche, porque les ha permitido ir cambiando las viejas butacas, que no eran reclinables, sin coste alguno.

Es la empresa suministradora, Decam, la que cobra los cinco euros por noche de los usuarios (hay un abono de cinco noches por 20 euros), tal como ocurre con otras empresas en los servicios de vending o de televisión, que también es de pago. Decam también se encarga del mantenimiento de las butacas. El Hospital de Granollers ha instalado de momento 96 butacas reclinables de pago en sus 300 habitaciones.

En otro frente, diversas plataformas por la sanidad pública han acudido este domingo a una nueva edición de la "marea blanca", que se desarrolla en plena campaña electoral, para reclamar la derogación de los decretos y leyes que permiten la externalización y auditorías urgentes de los contratos con empresas concesionarias "de todos los servicios privatizados" de cara a lograr su reversión.

La trigésima segunda edición de la "marea blanca" ha partido al mediodía desde la glorieta de Neptuno hasta la Puerta del Sol, pasando por la plaza de Cibeles en Madrid. A esta edición ha acudido el presidente de la gestora del PSM, Rafael Simancas, quien ha pedido que estas movilizaciones se transformen "en una acción positiva: el voto y el cambio de Gobierno. Hay que recuperar los recursos materiales y humanos que el PP ha recortado en la sanidad pública, potenciar la atención primaria, recuperar la atención especializada de calidad", dijo.