Dos premios "Príncipe de Asturias" protagonizaron ayer la actualidad científica mundial relacionada con el espacio: el físico británico Stephen Hawking (Concordia, 1989) y la Royal Society de Londres (Comunicación y Humanidades, 2011). Hawking eligió el escenario de la Royal Society -la comunidad científica en activo más antigua del mundo-, para presentar un ambicioso proyecto que busca encontrar en la Vía Láctea y otras cien galaxias cercanas señales de vida extraterrestre en los próximos diez años.

El científico se ha asociado con el multimillonario ruso Yuri Milner, que hizo fortuna con empresas tecnológicas, para lanzar el programa "Iniciativas innovadoras ("Breakthrough initiatives"), que destinará 100 millones de dólares (92 millones de euros) durante la próxima década a la búsqueda de vida inteligente fuera de nuestro planeta. "Es el momento de comprometerse con la búsqueda de vida fuera de la tierra", afirmó Hawking. "Estoy aquí porque creo en la importancia de este proyecto", manifestó. "En algún lugar del cosmos, la vida inteligente podría fijarse en este proyecto", subrayó.

"¿Estamos solos? La tecnología actual nos da una oportunidad real de responder a una de las mayores incógnitas de la humanidad", dijo Milner. El empresario ruso aprovechará "la tecnología de Sillicon Valley", en Estados Unidos, donde están ubicadas las mayores empresas tecnológicas del mundo, para "explorar el cielo en busca de señales de vida".