El cantante estadounidense judío Matisyahu actuó este sábado finalmente en el Rototom Sunsplash y ha lanzado un mensaje de paz frente a un grupo de personas que izaba en el público banderas palestinas y pancartas con mensajes antisionistas.

Nunca una actuación en el festival Rototom Sunsplash, en la localidad turística española de Benicàsim, había suscitado tanta expectación en todo el mundo por motivos ajenos a lo musical.

Un grupo reducido de personas ha protestado durante la tarde y la noche en distintos puntos del recinto y finalmente se ha concentrado frente al escenario principal, donde ha izado una docena de banderas palestinas entre las miles de personas que han acudido al concierto.

Este grupo ha recibido a Matisyahu con silbidos cuando ha accedido al escenario a las 00.15 horas de hoy, los cuales no han cesado durante toda la actuación.

El cantante ha pedido a los asistentes: "dejadme oír vuestros silbidos".

El artista ha llegado a recibir el lanzamiento de una botella de agua y un zapato, que no le han alcanzado, pero ha hecho caso omiso y ha continuado con su actuación arropado por la mayoría del público que cantaba los temas más conocidos de su repertorio.

Al final de la actuación Matisyahu ha tocado "Jerusalem", ampliamente celebrada y coreada, así como el último tema "One Day", cuya letra dice: "He estado rezando por la gente para decir que no queremos luchar más, no habrá más guerras y nuestros niños jugarán".

Durante la canción Matisyahu ha agradecido al público por haber acudido a su concierto, se ha mostrado "feliz" por haber venido a tocar y ha proclamado "paz y paz para todo el mundo".

Ante las banderas palestinas ondeando, el artista ha dicho: "aquellos que no habéis traído bandera y tenéis vuestro corazón como bandera: levantad vuestras manos".

La polémica de Matisyahu ha monopolizado la atención del Rototom Sunsplash, más allá de las 200 actuaciones que han tenido lugar durante los 8 días de conciertos, y los debates y conferencias del Foro Social y la Reggae University, entre los que se registró un pico de público de 35.000 personas el lunes 17 con la actuación de Major Lazer.

El pasado día 15 el festival decidió anular la actuación de Matisyahu después de la campaña de Boicot, Desinversiones y Sanciones a Israel del País Valencià y de pedir al artista sin éxito que se pronunciara sobre el derecho del pueblo palestino a tener un estado propio, así como sobre la violencia.

La falta de respuesta fue el detonante para que el Rototom decidiera cancelar la actuación del artista y se desatara entonces una oleada de quejas a nivel nacional e internacional.

Numerosas entidades y organizaciones protestaron contra la cancelación, entre ellas el Gobierno de la Comunidad Valenciana, el de España y la Embajada de Israel.

El propio Matisyahu aseguró sentirse presionado por la organización para hacer una declaración política, que, explicaba, no se había pedido a ningún otro artista.

El festival reconoció entonces haberse equivocado y pidió perdón al artista y le invitó de nuevo a participar tal y como estaba previsto.

La noticia de que Matisyahu sí estaría finalmente en el Rototom llegó anteayer, y el artista manifestó en su página de Facebook que se había sentido utilizado como un "peón" por "conveniencia política" y su exclusión del Rototom Sunplash fue "dolorosa", pero con su vuelta al festival "gana" la música y la libertad de expresión.