Oviedo, J. B.

«¡Estamos en la fila 20!». Lo dice Etelvino Vázquez, director de interpretación del musical «El alma de la melodía». Una joven de Santander está haciendo una de las pruebas, recita un poema, y el director teatral la anima a que se imagine las dimensiones de un teatro y levante la voz. Fue un instante en una larga jornada de casting de selección de veinte artistas para intervenir en el «Alma de la melodía», un musical netamente asturiano que, sin embargo, ha despertado expectación en toda España, ya que ayer convocó a más de trescientos aspirantes a las puerta del Auditorio de Oviedo. «La mayoría son asturianos, pero se ha presentado gente de Madrid, Cantabria, Castilla y León y Andalucía», explica el productor ejecutivo, Nacho Fernández, que añade: «La idea es encontrar un perfil artístico completo que conjugue canto, interpretación y baile. No en vano, el musical es el género que más exige». Nacho Fernández adelanta las pautas del espectáculo y sitúa los ensayos generales entre «diciembre y marzo», para hacer el estreno en junio (hasta septiembre) en Asturias e iniciar gira en España en octubre. El productor ejecutivo explica que se necesitarán veinte artistas para hacer suplencias y trabajar en las giras sin necesidad de pararlas.

Jesús Ángel Arévalo es el director musical y entiende que está observando «nuevas generaciones muy preparadas a nivel interpretativo, no sólo es cantar». Efectivamente, entre las notas del teclado de Arévalo suenan algunas canciones pop, «Mujer contra mujer» y, claro está, tramos de algunos clásicos de los musicales («No llores por mí, Argentina», «Aquarius»). Y los aspirantes se defienden con nervios, pero plasmando sus cualidades. Hay mucho joven, pero también artistas expertos, incluso cantantes con números uno en las listas como el líder de «Guaraná», Juanra Arnaiz.

Luis Antonio Suárez, director de escenografía, considera, desde su óptica plástica, que «un 80% de los aspirantes es aprovechable» y muestra su optimismo ante gente tan joven. Una línea muy similar a la de Etelvino Vázquez, que fue explícito: «El que canta bien no va a tener dificultades para interpretar. Además, los jóvenes son mucho más asequibles a la enseñanza. Haremos cursillos» con los veinte que alcancen la recta final.

Por su parte, el guionista de la obra, David Serna, cree que hay que trabajar y mejorar el baile y la interpretación, apartados en los que los aspirantes están «un poco más flojos». Pero destaca la «renovación de los aspirantes». Para completar la formación, tanto la directora de coreografía, Estrella García, como la ayudante de dirección, Cristina Lorenzo, aportan sus fórmulas: «Éste es un género difícil y exigente en varias disciplinas. Han venido aspirantes con voces muy sonoras y también hay cuerpos que hay que trabajar para otras disciplinas», dice la coreógrafa, mientras que Lorenzo ve un futuro interesante en la combinación entre los aspirantes jóvenes y los más expertos».

El equipo de «El alma de la melodía» prosigue hoy el casting para comenzar el lunes la andadura de un musical hecho por profesionales asturianos, un musical inspirado en los grandes clásicos del género.