Con más de mil millones de mensajes al día, la aplicación WhatsApp es un gigantesco negocio en potencia. La popular aplicación de mensajería instantánea va a comenzar a exigir una cuota anual simbólica por su uso, extendido por todo el mundo a través del sistema operativo Android, propiedad del buscador Google. Se habla de 0,99 dólares (algo más de 0,70 euros) por el uso de una aplicación que en teoría nunca fue gratuita a partir del primer año de prueba. Ahora «las licencias que caduquen sólo se renovarán pagando», explica la página web de WhatsApp. Su competidor, la aplicación LINE, se apresuró a recordar que seguirá siendo gratis.