Miles de personas, más de un millón según los organizadores, se han manifestaron ayer en Madrid reclamando una igualdad real de derechos entre las personas sin importar su identidad de género y, especialmente, han pedido que la bisexualidad se haga visible. La concentración es la mayor de Europa.

La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, y el consejero de Presidencia de la Comunidad, Ángel Garrido, han recibido en la madrileña plaza de Colón a la manifestación estatal del Orgullo LGTBI, que ha discurrido en un ambiente festivo y reivindicativo. No ha faltado el recuerdo constante al que fue secretario de Igualdad socialista, Pedro Zerolo, a quien el Ayuntamiento ha dedicado una calle. Por primera vez esta marcha del Orgullo Gay ha contado con dos pancartas en la cabecera, una para reclamar "Leyes por la igualdad, ¡ya!" y otra para reivindicar que 2016 es el "Año de la visibilidad bisexual en la diversidad". Carmena y Garrido, junto al presidente de Cogam (Colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de Madrid), Jesús Grande, y Jesús Generelo, presidente de la FELGTB (Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales), han dado la bienvenida a las miles de personas convocadas por unas cuarenta asociaciones y una treintena de entidades.

Además, unas treinta carrozas -de partidos políticos, empresas y asociaciones sociales- han recorrido el Paseo del Prado (desde Atocha hasta Colón) al ritmo de canciones icónicas como "A quién le importa lo que yo haga", de "Alaska y Dinarama".

A la marcha gay 2016 han acudido, entre otros, el secretario político de Podemos, Íñigo Errejón, quien ha destacado que lo que empezó siendo "una reivindicación de gente valiente se ha convertido en una fiesta de orgullo para nuestro país".