Un equipo de científicos británicos ha comparado el clima actual con el período de calentamiento anterior a la última edad de hielo y ha descubierto que, entonces, se produjo una reducción del 65 por ciento del hielo marino de la Antártida, una cifra similar a las previsiones que se han realizado para finales de este siglo. El hallazgo es una contribución importante para el reto de hacer predicciones sólidas sobre el clima futuro de la Tierra.

Informes publicado en 'Nature Communications' describen cómo mediante la reconstrucción de la historia del clima de la Tierra --a través del análisis de núcleos de hielo de la Antártida-- pueden determinar qué condiciones ambientales había antes y durante las edades de hielo y los períodos cálidos del pasado.

Este nuevo estudio, se centró en las condiciones del hielo marino durante el período de calentamiento más reciente hace 128.000 años, conocido como el último interglaciar, que se produjo cuando las temperaturas globales eran similares a las actuales.

El hielo marino en el Ártico y la Antártica regula el clima, ya que en verano sus vastas áreas de blancura reflejan el calor del sol en la atmósfera, mientras que en invierno el hielo marino impide que el calor se escape del océano al aire.

Los modelos climáticos actuales prevén una reducción del hielo marino antártico de hasta aproximadamente el 60 por ciento a finales del siglo. Encontrar una reducción del 65 por ciento en el registro del clima durante el tiempo en que las condiciones climáticas globales fueron similares a las de ahora es especialmente relevante, según destacan los científicos.

El trabajo

Este grupo, formado por expertos del British Antarctic Survey (BAS) y de las Universidades de Bristol, Reading, Leeds y Cambridge, estudiaron los datos de núcleos de hielo extraídos en la capa de hielo de la Antártida Oriental. A continuación, se utilizaron modelos climáticos en el análisis de estos datos.

Los datos de las muestras de hielo y simulaciones de modelos climáticos se combinaron mediante técnicas estadísticas avanzadas para determinar el estado del hielo marino antártico hace 128.000 años. El autor principal, Max Holloway, ha explicado que "se sabe que el clima de la Tierra está cambiando y que los modelos climáticos predicen un mundo más cálido" pero "todavía no se está seguro de la magnitud precisa de los cambios futuros o de la línea de tiempo".

"Esto de buscar en el pasado puede ayudar. Hemos utilizado una serie de técnicas analíticas para cuantificar cambios en la extensión del hielo marino alrededor de la Antártida durante este importante pasado período de calentamiento", ha explicado.

Según ha relatado, esperaban ver una relación entre las temperaturas cálidas del periodo interglaciar y un colapso más allá de la capa de hielo de la Antártida Occidental. Sorprendentemente, se encontró que el importante retroceso del hielo marino de la Antártida es una explicación más probable. "Nuestro análisis sugiere que existió un colapso de la capa de hielo de la Antártida Occidental durante el último interglaciar. Algo que nuestro equipo estará estudiará con más detalle a través de otro proyecto de colaboración con Estados Unidos", ha precisado.

La situación de los polos

Ahora, los investigadores han observado diferencias entre los cambios del hielo marino en ambos polos. Esto se debe en gran parte a la geografía diferente: el Ártico es un mar helado rodeado de tierra y la Antártida es una masa de tierra congelada rodeada de mar. Mientras que en el Ártico ha sido registrado un amplio retroceso en el hielo, en los últimos decenios, la extensión del hielo marino en torno a algunas partes de la Antártida ha crecido.

La comprensión de las similitudes y diferencias entre los hemisferios ha sido objeto de intenso estudio por la comunidad de investigación polar internacional. La experta Louise Sime, ha apuntado que "el rápido retroceso actual del hielo marino en el Ártico tiene una importancia crítica para los ecosistemas de la zona y del clima global, pero al descubrir, por primera vez, un retroceso alrededor de la Antártida se ha establecido que el hielo marino en el hemisferio sur también es susceptible a las principales cambios climáticos".

Este descubrimiento nos ayudará a entender si los eventos de retirada del hielo marino o similares, serán más probables en un mundo futuro con altos niveles de CO2.