La Orquesta Sinfónica del Principado de Asturias y su titular, el maestro Rossen Milanov, inauguran esta tarde a las 20 horas en el Teatro Jovellanos de Gijón su temporada de abono. Mañana viernes tendrá lugar en el auditorio Príncipe Felipe de Oviedo, a la misma hora, la repetición del concierto. El programa que interpretará la formación asturiana está inspirado en la música y cultura rusas.

La obra con la que comienza el programa es "Pasión cautiva" de la compositora española Consuelo Díez Fernández (1958), especialmente conocida por sus aportaciones a la música electroacústica. No obstante, "pasión cautiva" está escrita para ser interpretada con una orquesta sinfónica, y es una obra que desde su estreno en 1997, se ha incluido en varias ocasiones en la programación de diversas agrupaciones orquestales.

La solista invitada para esta inauguración de la temporada es la joven pianista Natasha Paremski, nacida en Rusia pero afincada en New York, que interpretará el Concierto para piano nº 1 en si bemol menor, op. 23 de Piotr Ilich Tchaikovski, con el que ha obtenido muy buenas críticas en las salas de conciertos estadounidenses. Ha grabado este mismo concierto para el sello musical Naxos, junto a la "Rapsodia sobre un tema de Paganini", de Serguei Rachmaninov.

El concierto concluye con la Sinfonía nº 6 en si menor, op. 74, "Patética", también de Tchaikovsky. Se trata de la última sinfonía de este autor, y también una de las partituras más representativas del músico ruso, regida por el ideario romántico, en la que la idea del destino y de la muerte está siempre presente. Una obra clave del repertorio sinfónico actual, estrenada en San Petersburgo en 1893 que, a diferencia del anterior concierto para piano, refleja la madurez plena del compositor.