A principios de los años ochenta del siglo pasado comenzaron las campañas arqueológicas mediante las que se pudo constatar la importancia de Gijón (Gigia) dentro de la Hispania de Roma. Por ejemplo, en 1991 los arqueólogos descubrieron, debajo del palacio de Revillagigedo y del pavimento de la aneja plaza del Marqués, los restos de una gran factoría de salazones que estuvo activa a partir del siglo III y también restos de pescados (caballa, túnidos y grandes besugos).

Ese mismo escenario fue ayer el epicentro de la yincana romana a través de la obra de la historiadora británica Mary Beard (premio "Princesa de Asturias" de las Ciencias Sociales de este año), una de las actividades desarrolladas en Gijón por la Fundación Princesa de Asturias.

Los organizadores registraron algo más de quinientas inscripciones para participar en la yincana (332 on line), con lo que el número de personas que desde las once y media de la mañana hasta las dos de la tarde recorrieron el Gijón romano superó con creces esa cifra, dado que hubo inscripciones de una persona, pero también muchas por grupos.

Además, 27 miembros de la asociación romana del Bierzo "Ludus Bergidum Plavium", que tiene su sede en Cacabelos desde su fundación, en 2010 y cuenta con más de 450 socios, pusieron la nota colorista con sus atuendos de legionarios romanos y patricios. En la edición del año pasado de los premios, en Gijón ya hubo una yincana sobre Cuba a través de la obra del escritor Leonardo Padura.

A la hora de entregar el pergamino con las ocho pruebas de la yincana, en el vestíbulo del palacio de Revillagigedo, en uno de los grupos participantes, capitaneado por Óscar Nieto y con otros siete miembros, se comentaba que la yincana había sido "muy entretenida y fácil", salvó la tercera prueba, ubicada en el edificio de la antigua fábrica de Tabacos de Cimavilla, que consistía en adivinar "¿cuál es el grafiti actual que se ha colado entre los garabateados en las paredes de Pompeya?". No obstante, el grupo "jugaba en casa", todos son vecinos de Cimavilla.

Para los participantes en la yincana la prueba comenzó en la fachada del palacio de Revillagigedo, donde debían obtener el mapa que luego les llevaría a los restos de la muralla romana de la calle de las Recoletas, el patio del Museo Casa Natal de Jovellanos, la antigua fábrica de Tabacos, el Museo de las Termas Romanas del Campo Valdés, los jardines del Náutico, la calle de Munuza, la antigua rula y los jardines de la Reina.

Desde el gijonés barrio de Pumarín se acercaron a jugar en la yincana Luis Aurelio Meana y su hija Yaiza. "Fue muy divertido y nada difícil, muy entretenido para los dos", aseguraba el padre mientras se refería a su hija y a la historia de Roma, que "ahora lo está dando en el cole".

Tras superar las ocho pruebas, los participantes en la yincana introdujeron sus pergaminos-inscripción en varias urnas. Las que tengan las ocho respuestas válidas pasarán a un sorteo, del que saldrán las veinte personas que mañana, martes, realizarán una visita al Museo de la Villa Romana de Veranes. Mientras, pueden repasar algunas de las citas de la catedrática de Clásicas en Cambrige Mary Beard, como: "Hay muchos motivos para mirar a la Antigüedad, hay temas como la ciudadanía y la libertad que son comunes, y estudiarlos nos puede ayudar".