El electricista jubilado Pierre Le Guennec fue condenado el año pasado junto a su esposa, Danielle, a dos años de cárcel por esconder 217 obras del pintor español Picasso durante casi cuatro décadas. Guennec, de 77 años, sostenía que el genio malagueño se las había regalado entre 1971 y 1972. Sin embargo, ahora ha cambiado su versión ante el tribunal de apelación de Aix-en-Provence para afirmar que en 1973 la viuda del pintor, Jacqueline, le había pedido que guardara entre 15 y 17 bolsas de basura con obras en su interior, y que tiempo después le reclamó ese "legado", salvo una de las bolsas en señal de gratitud. "La señora tenía problemas con Claude Picasso (hijo del pintor)", dijo Le Guennec, quien adujo que mintió por miedo a ser acusado de robo y reclamó que devuelvan las obras.