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Un camino entre pucheros

Comida en tierra quirosana

Lara Berzocana está al frente del restaurante sidrería Las Ubiñas, en Bárzana, con especialidades como repollo relleno, cabrito, jabalí y chuletón a la piedra

Lara Berzocana, en la terraza del restaurante Las Ubiñas, en Bárzana. ANA PAZ PAREDES

Bárzana, la capital del concejo de Quirós, es un lugar que invita a pasearlo con tranquilidad, sobre todo cuando es punto de destino a la hora de comer tras haberse perdido por algunos de los mejores rincones de esta tierra poblada de encantos. Así, uno de esos lugares donde detenerse a disfrutar de la comida y de una buena tertulia, incluso si apetece echar también una partidina al futbolín, que haberlo haylo, es el restaurante sidrería Las Ubiñas, fácilmente identificable por su fachada de azul intenso y su pequeña terraza asomada a la carretera, en la zona central del pueblo.

Hace dos años, una joven emprendedora asturiana, Lara Berzocana González, que ya desde niña se crió en el mundo de la hostelería, se puso al frente de este establecimiento, ocupándose del servicio de barra y comedor, mientras que en la cocina quien manda en los fogones es su madre, Elena González Menéndez, una veterana en las lides hosteleras, pues ya lleva veintitrés años trabajando en este ramo y conociendo bien los secretos de la cocina asturiana y los gustos de su clientela, centrados en la zona donde hoy viven y trabajan.

Las Ubiñas es uno de esos bares en los que desde primera hora de la mañana los vecinos ya están comentando las noticias del día o las del pueblo ante una pinta de vino, un café, una botella de sidra o un buen caldo, que en estas fechas sienta estupendamente. Hay ambiente de chigre y es tan auténtico como esta joven hostelera, que con ilusión, pero también con experiencia y con simpatía, sirve a los comensales lo que demandan o bien lo que ella les aconseja, dependiendo de cada cual.

Así, de lunes a viernes, cuentan con un menú a 8 euros donde se puede elegir entre tres primeros, tres segundos y postres. Entre algunas de las elaboraciones que se sirven estos días, y variando cada uno de ellos, se pueden citar a modo de ejemplo pote asturiano, sopa de cocido, revuelto de setas y gambas, carne guisada, pollo al ajillo o cachopo de lomo. El fin de semana el menú es a 15 euros y hay cuatro primeros a elegir y también cuatro segundos. Entre algunos de los platos del fin de semana sirven pote, fabada, repollo relleno, parrillada de verduras, ensalada de la casa con gulas y setas, jabalí guisado, cabrito y caldereta de cordero. La presencia de pescados en la carta es escasa, destacando su lenguado relleno de marisco o los fritos de pescado. También se puede elegir entre varios postres.

Para quien prefiera pedir a la carta, las especialidades más demandadas son chipirones afogaos, venado guisado, chuletón a la piedra, que se sirve de manera que el cliente lo vaya haciendo a su gusto en la propia mesa, cachopo tradicional, el especial Las Ubiñas, este último de considerables dimensiones, o cachopo de setas, además de sartenes como la de jamón, chorizo y queso de cabra o la de patatas, gulas y gambas. En postres, citar, entre otros, la tarta de avellana y el arroz con leche.

Los comensales se distribuyen entre la zona del chigre y un comedor superior donde mandan la piedra y la madera. El fin de semana conviene reservar en el 603602955. Cierra el miércoles por descanso. No cuenta con aparcamiento propio y hay que estacionar el coche en el pueblo.

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