Grandes firmas y pequeños negocios. Todos tratan de aprovechar el potencial de las redes sociales para darse a conocer. Facebook es la plataforma que acapara la mayor parte del negocio publicitario en Internet y ahora ha anunciado que también incorporará anuncios en los vídeos, el Messenger e incluso en las Historias de Instagram.

En números, los ingresos publicitarios de Facebook del tercer trimestre de 2016 rondan los 7 mil millones de euros, un 30 por ciento más que en el año anterior según datos de Facebook. Este crecimiento obedece al tirón de los ingresos por publicidad móvil que ya representan el 80 por ciento de los beneficios publicitarios de la red social. Algo coherente si tenemos en cuenta el uso generalizado del teléfono para acceder a Internet. Sin embargo, el éxito del modelo publicitario de Zuckerberg radica en la llamada publicidad segmentada. Facebook utiliza la información que posee de los usuarios para mostrarle los anuncios que más le pueden interesar. Algo muy suculento para las empresas, rentable para la red social pero controvertido a nivel legal. En la actualidad Facebook está siendo investigado por la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) por el uso que hace de la información de los usuarios mientras Europa trabaja en la puesta en marcha de un nuevo reglamento para garantizar los derechos de los ciudadanos frente a las compañías en Internet. De forma paralela, Facebook está remodelando su política de privacidad.

Las marcas encuentran en las comunidades digitales la forma de acercarse a millones de personas y conseguir su objetivo final: vender. El sector de la moda es el que más aprovecha este filón respaldado, por informes como el de Brandwatch, que revelan que más de la mitad de las marcas que siguen los usuarios de Facebook e Instagram pertenecen a firmas de moda. Con semejante panorama, la publicidad está invadiendo todas las plataformas. En las últimas semanas Facebook ha anunciado que va a dar un paso más en este sentido y trabaja en incorporar publicidad en su Messenger y también en los vídeos. La red de Zuckerberg quiere que el vídeo sea una base fundamental de su negocio por lo que pagará a quienes produzcan este tipo de contenido, tal como ya lo está haciendo Youtube. Esta nueva política también afectará a Instagram, la plataforma hermana de Facebook. Parece que los vídeos de las Historias (aquellos que se borran en 24 horas) tendrán este tipo de publicidad en mitad del contenido que generan particulares. Marcas como Nike o Netflix ya trabajan con Instagram el nuevo formato de anuncio. Un modelo que también está utilizando Snapchat en sus publicaciones efímeras.

Pero, ¡ojo!. No todo vale. Esta semana Facebook retiraba un anuncio engañoso en el que aparecía la reina Letizia con un ojo morado seguido del titular "El rey Felipe está furioso con la reina Letizia". Todo para anunciar productos adelgazantes, que era lo que se escondía detrás de esta imagen de supuestos maltratos. Un sinsentido que consiguió su cometido: el clic fácil y la polémica como fórmula para llamar la atención.