Más que fotografías, Chema Madoz compone poemas visuales. Los objetos cotidianos, al pasar por su objetivo, multiplican su significado y, reunidos en sus fotografías, se convierten en potentísimas metáforas. Madoz, en un proyecto que ha contado con el mecenazgo de la Fundación María Cristina Masaveu, ha posado su mirada siempre desconcertante y original sobre Asturias. Y el resultado han sido 34 fotografías inéditas -30 de ellas en copia única- con las que trata componer y exponer su "idea" de la región. El próximo 9 de febrero abrirá en el Centro Conde Duque de Madrid la exposición sobre esta original visión de Asturias, que lleva por título "El viajero inmóvil". El próximo mes de mayo la obra de Chema Madoz podrá contemplarse en el Museo de Bellas Artes de Asturias.

Chema Madoz (Madrid, 1958), acumula numerosos galardones, entre ellos el Premio Nacional de Fotografía del año 2000. "El viajero inmóvil" forma parte del programa de mecenazgo de la Fundación María Cristina Masaveu que lleva por título "Miradas de Asturias". Su propósito es, según la Fundación, "crear un fondo de obra inédita inspirado en Asturias y sus gentes a través de la mirada de fotógrafos galardonados con el Premio Nacional de Fotografía, invitados especialmente cada año a participar". El último en exponer su obra fue Joan Fontcuberta, cuya muestra "Arstusia" fue un auténtico éxito de visitas. Anteriormente, habían aportado su mirada sobre la región los fotógrafos Alberto García-Alix, José Manuel Ballester y Ouka Leele.

Según indica la Fundación María Cristina Masaveu, para la exposición "El viajero inmóvil" Madoz ha tomado el camino inverso del que habitualmente sigue para componer sus imágenes desconcertantes: "Esta vez no son los objetos y sus significantes libres los que tienen la palabra, sino que es la propia idea de Asturias la que se convierte en el objeto a observar y definir".

Abstracción

Borja Casani, comisario de esta exposición, apunta que "el mirar Asturias requiere, desde la perspectiva y los modos de hacer de Madoz, convertir la realidad de su espacio geográfico, sus costumbres y sus gentes, en una abstracción". Para ello el fotógrafo "nos propone un viaje inmóvil, pues para la realización del trabajo no necesita desplazarse al lugar concreto, se trata de viajar por la imaginación para descubrir los elementos conceptuales que conforman la idea de una Asturias de la mente".

La exposición de Madoz, que posee una de las obras más originales del panorama fotográfico español, irá acompañada de un catálogo con textos de Borja Casani y Juan Bonilla. En ese volumen aparecerá también la serie completa de fotografías, además de un cuadernillo de dibujos con los bocetos preliminares que hizo para el proyecto.

Chema Madoz está en posesión de numerosos premios. Entre ellos, el premio "Kodak" (1991), el Premio Nacional de Fotografía (2000) el Premio "PHotoEspaña" (2000) o el Premio "Bartolomé Ros" (2010). Ha expuesto en numerosas galerías y museos por todo el mundo, entre los que destacan el Museo Nacional Reina Sofía, en Madrid; el Netherland Photomuseum de Róterdam; el Hermitage Museum de Kazan; o el Multimedia Art Museum de Moscú, entre otros.