"Bajo la piel de lobo", la película escrita y dirigida por el cineasta noreñense Samu Fuentes que se rueda actualmente en el occidente asturiano, inicia su última semana de rodaje. Cinco jornadas en las que Fuentes completará las tomas precisas para poder contar la historia de "Martinón", el alimañero interpretado por Mario Casas, cuya vida en soledad se ve alterada por una mujer.

Entre las secuencias ya filmadas, hay tomas que ayudan a perfilar al personaje de Martinón, como las de la cueva del Pímpano filmadas el pasado viernes, pero también las que propician el desarrollo narrativo de la historia. Es el caso de las escenas rodadas en el Museo de los Molinos de Mazonovo, en Taramundi, donde el equipo trabajó durante dos jornadas.

Por ese escenario de los molinos de Mazonovo pasaron los intérpretes principales del filme: Mario Casas, por supuesto, pero también Irene Escolar (que encarna a Adela), Ruth Díaz (que interpreta a Pascuala) y Quimet Pla (que da vida a Marcial). La presencia de tantos intérpretes en un espacio tan reducido complicaba el rodaje de algunas de las escenas en el molino, una situación agravada por la lluvia que caía en el exterior, que limitaba las posibilidades de captar luz natural. Pero estas circunstancias no supusieron ningún problema, gracias a la habilidad del director de fotografía, Aitor Mantxola.

El guipuzcoano, con una dilatada trayectoria a sus espaldas, sacó todo el jugo al escenario y logró que las limitaciones de espacio fuesen un activo de las escenas. Y es que, más allá de su desempeño en estas secuencias concretas, Mantxola es una de las piedras angulares de la producción. No en vano, el director de fotografía y Samu Fuentes trabajaron durante varias semanas en el aspecto visual del filme, para el que analizaron diversos repertorios pictóricos.

En Mazonovo, además, tuvo gran peso el departamento de arte, que contó con un aliado adicional: Carlos López-Cancelos, dueño del complejo, que se encargó de poner en marcha las estructuras hidráulicas durante la filmación. Mención aparte merece el desempeño de Quimet Pla. Cofundador de "Els Comediants", Pla ha desarrollado la mayor parte de su carrera en el teatro, por lo que puso especial atención en la preparación de las escenas, para amoldarse al tono del resto del reparto. Durante estas jornadas en el molino, fue frecuente verlo hablar con Samu Fuentes sobre sus escenas. El cineasta asturiano quedó muy satisfecho con su trabajo, y el intérprete barcelonés encandiló además al equipo con su buen humor.

Tanto Quimet Pla como Ruth Díaz e Irene Escolar han abandonado ya el rodaje, tras terminar la filmación de todas sus escenas en la película. En Taramundi permanece Mario Casas, al que se unen esta última semana Kandido Uranga y Josean Bengoetxea, quienes tendrán peso en las escenas que aún quedan por rodar. El rodaje de "Bajo la piel de lobo", producida por Orreaga Filmak y Nasa Producciones, concluye este viernes, tras seis intensas semanas de trabajo, las cuatro primeras en el pirineo oscense y las dos últimas en el occidente asturiano.