El cantante Rodrigo Cuevas (Oviedo, 1985), un artista único que ha logrado fusionar con gran personalidad la tradición asturiana y la modernidad más vanguardista, ha sido distinguido por LA NUEVA ESPAÑA como "Asturiano del mes" de marzo.

El electrocupletista acaba de presentar en el teatro de la Laboral su nuevo espectáculo, "El mundo por montera". Rodrigo Cuevas también conquistó al público ovetense con su monumental actuación en el Campoamor por la Semana del Audiovisual Ciudad de Oviedo (SACO), en la que además se estrenó un documental que recorre su vertiginosa trayectoria: "Rodrigo Cuevas. Campo y tablas". Ya en abril, Cuevas participó en el concierto homenaje a Tino Casal organizado en el teatro Campoamor de Oviedo.

El ascenso del artista ovetense ha sido imparable desde que, hace menos de dos años, una grabación de su "Ritmo de Verdiciu" derivase en fenómeno viral a través de las redes sociales. La pieza, que fusiona la canción tradicional "Soy de Verdicio" con la música discotequera de "Ritmo de la noche" (un hit veraniego de la década de 1990 del grupo belga "Mystic"), dio a conocer a Cuevas más allá de los ámbitos "underground". Pero el artista pronto demostró que su éxito no era flor de un día y que su estudiada revisión del folclore y la vestimenta regionales, lejos de ser elementos accesorios, son el resultado de una reflexión profunda sobre la cultura tradicional, subversiva y reivindicativa a un tiempo, en la que el humor ocupa además un lugar de privilegio.

Durante su formación, Cuevas ya había dado muestras de su talento y de una personalidad inquieta. Estudiante de piano en el Conservatorio Superior de Música de Oviedo, el futuro "showman" no dudó en cambiar de aires y desplazarse a Barcelona para completar su formación en la Escuela Superior de Música de Cataluña.

En paralelo, el asturiano se introdujo en el mundo del cabaret y se inició como "clown". En 2008 se trasladó a Santiago de Compostela, donde llegó a tocar el acordeón en las calles. A finales de 2009, Cuevas se instaló en la pequeña localidad de Barbeira de Arriba, en Pontevedra. Un retorno al campo que aportó nuevos matices a su rico despliegue escénico y en el que encontró un lugar confortable en el que vivir.

El artista ovetense publicó su primer trabajo discográfico en 2012: "Yo soy la maga", un álbum en el que revisa temas tradicionales gallegos. Pero sería con su siguiente trabajo, el EP "Prince of Verdiciu", con el que el cantante daría con la tecla y terminaría por perfilar su estilo musical y escénico. Una evolución en la que también jugó un papel fundamental su espectáculo "Electrocuplé", presentado en 2014.

Ahora, Rodrigo Cuevas vuelve a los escenarios con un nuevo "show", "El mundo por montera", con el que recorrerá recintos de toda España. Unas tablas a las que el artista ovetense se subirá luciendo madreñas, medias, ligas, calzón, faja, chaqueta y montera picona, y sobre las que brillará con su talento, su buen humor y ese arrojo, tan asturiano, del que siempre ha hecho gala.