El neurólogo estadounidense Michio Hirano visitó al bebé británico Charlie Gard, enfermo terminal y al que sus padres quieren mantener con vida artificialmente en contra de la opinión médica en el Reino Unido. El especialista en miopatías y enfermedades mitocondriales examinó al niño y se reunió con los doctores que le atienden en el hospital Great Ormond Street de Londres, que abogan por desconectarle de las máquinas que lo mantienen vivo al concluir que no tiene perspectivas de mejorar. Hirano ha ofrecido a los padres del bebé de once meses administrar un tratamiento experimental, que arroja un "10 % de probabilidad de fortalecimiento de los músculos" y de una "pequeña pero significativa" mejora de la función cerebral.